Un vídeo publicado este martes en la cuenta de Instagram @Girona_perduda ha encendido las alarmas en la ciudad. En las imágenes se ve claramente a una persona trepando al árbol de Navidad instalado en un punto céntrico de Girona, mientras varios acompañantes graban la escena.
Las capturas, que se han hecho virales en pocas horas, muestran cómo el individuo sube parte de la estructura ornamental, un elemento pensado exclusivamente para la decoración navideña y no para ningún tipo de actividad física o exhibición. Según explica la misma publicación, alrededor, los amigos del protagonista comentan la escena y lo animan mientras graban el momento: "¡Tú, que no paras!". Según Girona_perduda, el usuario que sube al árbol sería un 'influencer' que tiene unos 5.000 seguidores en las redes sociales, aunque no especifican de quién se trataría.
Posible riesgo para la seguridad
Aunque no hay constancia de que la persona haya resultado herida ni de que el incidente haya generado daños materiales, fuentes consultadas recuerdan que este tipo de acciones pueden suponer un riesgo importante, tanto para quien escala como para las personas que pasan por el entorno. El árbol de Navidad es una estructura no diseñada para soportar peso humano y, en caso de una posible caída, podría desencadenar servicios de emergencia y movilizar recursos públicos.
También se pone sobre la mesa el riesgo potencial de dañar el montaje, que forma parte de la decoración navideña municipal y que concentra un alto volumen de visitantes durante estas fechas.
El vídeo obre el debat sobre el civisme a l’espai públic
La escena ha vuelto a situar el foco en el uso del espacio público y en el comportamiento incívico asociado a la búsqueda de contenido viral. Diversos usuarios de redes han expresado su preocupación por el precedente que puede generar este tipo de vídeos, especialmente en periodos de gran afluencia en las zonas comerciales y de paseo de la ciudad.
El vídeo continúa circulando en las redes, alimentando un debate que cada año cobra más fuerza: hasta qué punto la búsqueda de notoriedad digital puede poner en riesgo la seguridad y el patrimonio urbano.