El Ayuntamiento de Girona ha descartado subir el límite de velocidad del radar de la calle de Pedret de 30 a 40 km/h, pero sí que instalará una nueva señal informativa para advertir mejor a los conductores de la presencia del cinemómetro. El concejal de Movilidad, Isaac Sànchez, justifica la decisión tanto por lo que establece el Reglamento General de Circulación como por motivos de seguridad vial, ya que se trata de “un punto sensible”.
Según explica Sànchez, “de momento no tocamos el límite, pero sí que instalaremos una nueva señal que informe a los conductores”. El radar está situado justo después de una curva de entrada al barrio, con el río Ter muy cerca, y cerca tanto del centro cívico de Pedret como de dos paradas de autobús, factores que, según el consistorio, obligan a mantener una velocidad reducida.
Más de 7.300 multas desde agosto
El radar de Pedret forma parte del paquete de cuatro cinemómetros que el consistorio activó el 13 de agosto. Está ubicado a la altura del número 146 de la calle de Pedret, donde el límite es de 30 km/h. Los otros aparatos se encuentran junto al colegio Maristas, en la bisagra del Güell y en la carretera Barcelona, pasado el cruce con la calle de la Creu.
Desde su puesta en marcha, el radar de Pedret ya ha impuesto más de 7.300 sanciones. Solo durante el primer trimestre de funcionamiento —entre el 13 de agosto y el 17 de noviembre— denunció a 5.470 conductores. Posteriormente, hasta el 14 de diciembre, se han sumado 1.902 multas más por exceso de velocidad.
Un 20–30% menos de sanciones en las últimas semanas
A pesar de las cifras elevadas, el concejal destaca que el volumen de multas ha comenzado a bajar. “Estas últimas semanas el número de sanciones se ha reducido entre un 20 y un 30%”, subraya Sànchez, que lo atribuye al hecho de que “poco a poco los conductores van tomando conciencia de cuál es el límite de velocidad en este punto”.
Los datos semanales confirman esta tendencia: entre el 17 y el 23 de noviembre se registraron 567 sanciones; la semana siguiente, 470; del 1 al 7 de diciembre, 466; y del 8 al 14 de diciembre, la cifra bajó hasta 399.
Señalización reforzada y posible revisión futura
El consistorio había abierto la puerta a estudiar un incremento del límite hasta los 40 km/h, como ya ocurre en otros puntos de la ciudad. De momento, sin embargo, esta opción queda descartada. “Todo ello nos hace pensar que debemos mantener este límite de velocidad”, insiste el concejal, a pesar de admitir que en un futuro no se cierra a repensarlo.
A corto plazo, la actuación prevista es clara: reforzar la señalización. “Con esta medida queremos conseguir que haya menos sanciones y que se mantenga la velocidad que corresponde a esta vía”, explica Sànchez.
Finalmente, el concejal recuerda que los límites de velocidad ya estaban vigentes desde 2021 y que los cuatro radares van acompañados de un radar pedagógico, la pantalla que indica a los conductores la velocidad a la que circulan