Un turista ha muerto tras precipitarse desde un acantilado en Tossa de Mar (Selva) cuando quería hacer una fotografía. Los hechos ocurrieron el sábado alrededor de la medianoche en la zona de la cala Futadera.
La víctima mortal es un francés de más de 30 años que estaba de vacaciones por la zona con su familia. El aviso del accidente se recibió este sábado poco después de las doce menos cuarto de la noche. Al parecer, el turista traspasó una valla con la intención de hacer una fotografía, resbaló y cayó al vacío desde una altura de entre 30 y 35 metros.
El suceso movilizó a efectivos de los Mossos d'Esquadra, de la Policía Local, del SEM, de los Bomberos y de Salvamento Marítimo. Los Bomberos, que enviaron siete dotaciones a la zona, activaron unidades del GRAE -tanto la terrestre como la subacuática- para poder rescatar a la víctima, que había caído en una zona de difícil acceso cerca de las escaleras que desde lo alto del acantilado bajan hasta la cala.
Después de acceder al lugar donde estaba el turista, que se encontraba inconsciente, pero respiraba, los GRAE lo rescataron realizando un izado con el helicóptero nocturno de Salvamento Marítimo. El rescate se realizó ya entrada la madrugada, sobre las dos y cuarto de la noche. La víctima ingresó en el hospital Josep Trueta de Girona, pero debido a la gravedad de las heridas acabó falleciendo.
Los Mossos d'Esquadra, que abrieron una investigación para aclarar las circunstancias del suceso, han concluido que se trata de una muerte accidental.
