Un importante premio de la Grossa de Cap d'Any ha llegado a Girona, concretamente al Estanc Ciutadans, ubicado en el corazón del Barri Vell. Este establecimiento ha comercializado un total de 30 billetes correspondientes al número 92574, cada uno dotado con una recompensa de 65.000 euros, que representa un retorno de 6.500 euros por cada euro jugado.
El propietario, Àngel Almazán, recibió la noticia mientras hacía las últimas compras para preparar la cena de Fin de Año. Ha relatado con emoción: "He visto que había tocado en Girona y he pensado: '¡Ostras qué suerte el que lo haya dado, con la ilusión que a mí me hacía!' Pero justo me ha llamado el comercial para decírmelo y casi me pongo a llorar".
El establecimiento cerrado cuando se conoció el premio
El estanco estaba cerrado en el momento en que se anunció el segundo premio, pero Àngel Almazán no dudó ni un instante cuando le comunicaron la buena noticia desde Loteries de Catalunya. El promotor, Benet Gironès, quien hace años le propuso vender billetes de este sorteo tradicional, le hizo llegar la sorpresa: "¡Casi me pongo a llorar cuando me lo ha dicho, las piernas me hacían flaquear!".
Acompañamiento mediático y felicitaciones de los clientes
Ahora mismo, Almazán ya se ha trasladado hasta el estanco donde se ha encontrado con periodistas y cámaras interesados en conocer más detalles sobre este reparto que suma cerca de los dos millones de euros. Además, varios clientes han aprovechado para felicitarle personalmente por el papel que ha tenido en esta histórica jornada
Una experiencia repetida con premios importantes
No es la primera vez que este establecimiento hace felices a sus vecinos gracias a los premios populares. De hecho, Almazán recuerda haber vendido billetes ganadores durante la Grossa de Sant Jordi del 2024, donde se repartieron 1.500 euros por cada billete vendido desde su establecimiento
Esta experiencia le deja recuerdos emotivos: "Me encontré con muchos clientes muy contentos haciéndome abrazos y besos. Y recuerdo a una abuela que se me puso a llorar porque, gracias al premio, había podido hacer el mejor regalo a sus nietos: ¡había comprado 15 billetes!".
Más allá de los números: una comunidad cercana y emocionada
Mientras desconoce todavía los nombres de los afortunados entre los treinta billetes ganadores vendidos —mayoritariamente clientes habituales del barrio— confía en que pronto descubrirán quiénes son los beneficiarios: "Seguro que lo acabaremos sabiendo, aquí nos conocemos todos" ha indicado antes de abrir una botella de cava para celebrar esta gran noticia.