El cuerpo de un hombre joven fue encontrado este martes en una zona boscosa del municipio de Lloret de Mar (la Selva). El joven iba indocumentado y no presentaba aparentes signos de violencia.

Fue un vecino de la zona que paseaba por el bosque que se topó con el macabro hallazgo y avisó inmediatamente a las autoridades. Al llegar, los sanitarios comprobaron que el chico estaba muerto y no se podía hacer nada para reanimarlo. Según los Mossos podría hacer poco que la víctima había muerto, probablemente de una parada cardíaca, extremo que deberá confirmar la autopsia.
Los investigadores asociaron el hallazgo del joven muerto con una denuncia por desaparición, interpuesta hace cuatro días por la familia del turista británico Josh Rogers, de Birmingham y de 25 años, a quien no podían localizar. El chico no estaba en el hotel donde debía alojarse y no tenían forma de contactar con él.

Ahora los investigadores deberán determinar, con la ayuda de la familia y con el análisis de la habitación del hotel donde se alojaba, si la víctima del bosque es, en efecto, Josh Rogers.