Un estudio liderado por la Universitat de Girona (UdG) apunta que las dietas vegetarianas poco saludables (donde predominan productos refinados y azucarados) se asocian con más daños en el ADN de los espermatozoides. El estudio ha analizado la calidad de los espermatozoides de 200 voluntarios y también los hábitos alimentarios que tienen. Algunos de ellos seguían dieta mediterránea, otra occidental, otros una dieta vegetariana saludable y otros también era vegetariana pero poco saludable. Los investigadores remarcan la importancia de tener una buena alimentación para preservar el ADN del esperma y mejorar la capacidad de concepción y desarrollo del embrión. En este sentido, apuntan que no todas las dietas vegetarianas son igual de saludables.
La investigación ha sido liderada por el investigador postdoctoral de la Universitat de Girona (UdG) y el Centre de Recerca en Agrigenòmica (CRAG) Marc Llavanera, bajo la dirección del profesor lector e investigador de la URL Albert Salas-Huetos. También han participado Nancy Babio y Jordi Salas-Salvadó, (URL) y el investigador de la UdG Marc Yeste.
El equipo investigador, que forma parte del proyecto internacional Led-Fertyl, analizó la calidad de la cromatina de los espermatozoides mediante pruebas de laboratorio reconocidas. También estudió los hábitos alimentarios de 200 voluntarios para determinar hasta qué punto seguían diferentes tipos de dietas, como patrones vegetarianos saludables y no saludables, la dieta mediterránea o una dieta de tipo occidental.
Hasta ahora, el equipo ya había realizado algunas investigaciones que apuntaban que la dieta mediterránea y los patrones vegetales saludables se asocian con una mejor calidad seminal, mientras que las dietas poco saludables aportan peores resultados. Ahora, el nuevo estudio remarca que no todas las dietas vegetarianas son igual de saludables. Aquellas que se basan en productos refinados o azucarados o los alimentos ultraprocesados, aunque sean vegetarianos, conllevan un empeoramiento de la salud espermática. Por el contrario, alimentos como la fruta, cereales integrales, legumbres y frutos secos se relacionan con mejores resultados. El estudio se ha publicado recientemente en la revista científica 'Reproductive BioMedicine Online' y es el primer trabajo epidemiológico que relaciona de manera directa los patrones alimentarios con la integridad del material genético del espermatozoide.