Andrea Cavallari, un joven de 26 años que se escapó el 3 de julio después de un permiso de estudios y fue condenado por la masacre de Corinaldo, donde murieron seis personas, ha sido identificado y arrestado en Lloret de Mar (la Selva). La Unidad Regional de Investigación de la Policía Penitenciaria logró detenerlo en colaboración con la Policía Nacional en esta localidad turística de la Selva.
Cavallari, un recluso de la prisión de Dozza de Bolonia, en el norte de Italia, había obtenido permiso para defender su tesis doctoral: fue confiado a su familia y no escoltado por funcionarios de la prisión. El 3 de julio, desapareció después de almorzar con familiares en el centro histórico de la capital emiliana, y la búsqueda comenzó entonces. Además del caso de la fuga, la Fiscalía de Bolonia también ha abierto una causa por complicidad, para determinar quién pudo haberlo ayudado a escapar. Queda por ver cómo llegó a Cataluña y qué ha estado haciendo en los últimos días.
DOCUMENTACIÓN FALSA
Cavallari fue detenido alrededor de las diez de la mañana cuando se preparaba para salir de un hotel en Lloret de Mar, donde había reservado alojamiento con un nombre y documentos falsos. Iba desarmado y tenía numerosos billetes falsos en el bolsillo, cuyo origen se está investigando actualmente.
Cavallari, además, ha contado con apoyo financiero, ya que, según los investigadores, durante su fuga hizo vida de turista, yendo a restaurantes, discotecas o alojándose en un hotel.
Cavallari fue atrapado haciendo el check-out y, según la reconstrucción de los investigadores, no opuso resistencia cuando fue detenido, ya que los agentes lo habían atrapado desprevenido. Andrea Cavallari fue entregado al magistrado de la Oficina Judicial Central núm. 3 de la Audiencia Nacional, que ordenó su detención preventiva en la prisión de Can Brians a la espera de la extradición a Italia, que podría producirse hoy mismo.
LA TRAGEDIA DE CORINALDO
Una pandilla de delincuentes de entre 19 y 22 años en aquel momento, conocida como la Banda del espray, originarios de la zona de Módena, se especializaron en robos usando espray de pimienta. En la discoteca Lanterna Azzurra de Corinaldo, una noche de diciembre de 2018, poco antes de un concierto de rap, los seis condenados causaron el pánico entre la multitud y una estampida masiva que condujo a la tragedia: seis personas muertas, cinco de las cuales menores de edad, y 59 más heridas de diversa consideración.
