El presidente del Partido Popular en Barcelona, Daniel Sirera, ha reclamado este miércoles medidas para frenar la “inmigración desordenada” en la ciudad, en el marco de una nueva campaña del partido centrada en propuestas sobre integración y convivencia.
En una rueda de prensa en el barrio de El Raval, Sirera ha defendido que es “positivo que personas de otros lugares vengan a Barcelona si es para integrarse, aportar y trabajar”, pero ha advertido que hay que actuar contra aquellos que, según ha dicho, “no tienen trabajo ni voluntad de integrarse”. “La inmigración debe ser legal y ordenada”, ha remarcado, asegurando que la campaña del PP es “a favor de la inmigración ordenada, no en contra de la inmigración”.
Entre las medidas planteadas, el dirigente popular ha propuesto prohibir el uso del burka y el nicab en espacios públicos y denegar informes de arraigo —necesarios para obtener la residencia— a los migrantes que incumplan la ordenanza de civismo municipal. Esta iniciativa ya se presentó en el pleno del Ayuntamiento de Barcelona, pero fue rechazada por el resto de grupos
Sirera también ha pedido que la Guardia Urbana trabaje conjuntamente con los Mossos d’Esquadra para identificar mafias y personas en situación administrativa irregular. Según ha explicado, el objetivo sería determinar la actividad y los medios de subsistencia de estas personas, y en caso de que no puedan acreditar un trabajo o una ayuda económica, que se activen los procedimientos de retorno a sus países de origen con la colaboración de la Policía Nacional.
El líder popular ha justificado estas propuestas como parte de una estrategia para mejorar la convivencia y la seguridad en Barcelona, afirmando que la ciudad “necesita una política de inmigración clara, ordenada y justa, que ponga límites y garantice la integración real”.