Mollet inicia la campaña de invierno para podar 2.000 árboles en el espacio público

La actuación, que se alargará hasta marzo, prioriza la seguridad, la salud del arbolado y la reducción de alergias, garantizando la preservación de las especies protegidas y el verde urbano

03 de noviembre de 2025 a las 15:43h
Actualizado: 03 de noviembre de 2025 a las 15:43h

Un año más, Mollet del Vallès ha puesto en marcha la campaña de poda del arbolado durante la cual se prevé la poda de un total de 2.000 árboles durante los meses de invierno. Está previsto que esta campaña finalice en marzo del año que viene. Con campañas como esta, el Ayuntamiento de Mollet del Vallès sigue apostando por un espacio público de calidad y velando por el verde urbano.

Durante los meses de invierno, la poda es más severa que el resto del año y está motivada principalmente por la disminución de alergias y molestias, así como por la falta de espacio y la salud del arbolado, y la campaña de poda anual es una de las muchas actuaciones que se llevan a cabo con este propósito.  

En este sentido, desde el punto de vista de la movilidad, la accesibilidad y la salud, de nuevo se tienen en cuenta una serie de criterios técnicos y de servicio a la ciudadanía a la hora de realizar los trabajos de poda:

  • Seguridad de los árboles: se retiran árboles muertos, muy debilitados o que presentan deficiencias estructurales que podrían derivar en caída de árboles o ramas.
  • Salud de las personas: se incrementa la frecuencia cuando podar los árboles permite reducir los problemas de alergias a las semillas o al polen.
  • Visibilidad y servicios: se pueden los árboles que pueden afectar la visibilidad o funcionalidad de los pasos de peatones, semáforos, alumbrado público, señalización y también cuando la proximidad a balcones o ventanas es excesiva.

Asimismo, se seguirá teniendo en cuenta que la poda respete la nidificación de las especies protegidas de aves, que no se perjudique a las especies animales beneficiosas y que se mantenga la estructura de la copa que debe ayudar a luchar contra el cambio climático en la ciudad, especialmente en los periodos de calor extremo.

El resto del año también se lleva a cabo la poda de árboles por razones de seguridad, para destapar señales y farolas o por si se producen rupturas de ramas.

Con esta poda, los árboles pueden mantener un porte más natural, lo que permite que cumplan mejor con sus funciones de captura de contaminantes y de dióxido de carbono (CO₂), así como proporcionar sombra mejorando el confort térmico en la ciudad.

Para mejorar el plazo de resolución de incidencias puntuales, además de la brigada de poda que realizará los trabajos en calles enteras con la campaña de poda de invierno, habrá un equipo diferenciado para la poda por incidencias y aplicación del plan de riesgo para resolver con mayor celeridad las necesidades de poda más urgentes y poder ejecutar rápidamente las prescripciones que se deriven de la aplicación del plan de riesgo del arbolado de la ciudad.

En el siguiente apartado en la página web municipal se pueden encontrar datos detallados sobre el arbolado de la ciudad y los principales trabajos que se llevan a cabo.

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