Noche insólita en Martorell donde una patrulla de los Mossos d'Esquadra ha terminado deteniendo a un joven de 36 años que les había saludado y acumulaba una cincuentena de delitos. Los hechos han tenido lugar alrededor de las cinco de la madrugada, cuando el individuo estaba sentado en un banco y ha saludado a los agentes que estaban ejecutando tareas preventivas. Debido a esta actitud sospechosa, la policía catalana ha identificado al hombre, quien tenía diez órdenes de búsqueda y detención.
Los Mossos d'Esquadra han quedado extrañados por la presencia del hombre a altas horas de la noche, pero la verdadera sorpresa ha llegado después de su identificación. El individuo de 36 años contaba con 54 antecedentes por delitos de robos con fuerza, robo con violencia y receptación (aprovecharse de un delito que ha cometido alguien y no denunciarlo). Tal como ha informado El Caso, la policía no ha dudado y después de comprobar que acumulaba una decena de órdenes de búsqueda y detención lo han trasladado a comisaría y más tarde ha ingresado en prisión.
En esta ocasión, la actitud 'desafiante' del ladrón ha provocado su detención, pero desde principio de año los Mossos d'Esquadra han intensificado sus vigilancias para detener la multireincidencia. Los múltiples dispositivos del 'Pla Kanpai' han terminado con centenares de detenidos que acumulan miles de delitos con el objetivo de reforzar la seguridad en las calles. De esta forma, después de la detención del individuo de 36 años, la población de Martorell ha ganado tranquilidad con el ingreso en prisión de un nuevo ladrón multireincidente que delinquía con 'impunidad'.
