La Audiencia de Barcelona ha confirmado la pena de dos años de prisión impuesta a un médico del Departamento de Interior por abusos sexuales a una mossa d’esquadra en 2019. El tribunal desestima los recursos presentados tanto por el condenado como por la Generalitat, que actúa como responsable civil subsidiaria, y ratifica íntegramente la sentencia dictada en junio de 2024 por un juzgado penal de Barcelona.
El médico, Jordi P., deberá cumplir dos años de prisión, dos más de libertad vigilada y dos años de inhabilitación para ejercer como médico. Además, deberá indemnizar a la víctima con 10.000 euros por los daños morales y psicológicos causados.
Los hechos se remontan al 6 de noviembre de 2019, cuando la mossa acudió al centro médico del Departament d’Interior para revisar su adaptación laboral debido a problemas físicos. Durante la visita, el médico se aprovechó de su posición y de la vulnerabilidad de la paciente para realizarle tocamientos en los pechos, en el pubis y en la zona anal bajo el pretexto de una exploración médica, sin utilizar guantes ni ninguna justificación médica.
Según la sentencia, los magistrados consideran probado que el acusado actuó “para satisfacer sus instintos sexuales más bajos”, y remarcan la “coherencia, detalle y credibilidad” del relato de la víctima, así como el impacto emocional que le provocó la agresión.
El tribunal también subraya que la mujer reaccionó con “estado de shock” ante los hechos y que su versión es “plenamente verosímil”.
Tras conocer la decisión judicial, el sindicato Fepol ha expresado su satisfacción por la ratificación de la condena, aunque recuerda que todavía hay tres mujeres más que han denunciado al mismo médico, una de ellas por una presunta agresión sexual.