La histórica compañía de embutidos Schara ha confirmado que no reanudará la producción en su planta de la Zona Franca de Barcelona, casi tres años después del incendio que destruyó las instalaciones. La empresa ha anunciado el despido definitivo de 56 empleados, aunque prevé medidas de acompañamiento y recolocación para minimizar el impacto sobre la plantilla.
El cierre forma parte del plan de reestructuración de la deuda validado por los juzgados y se incluye en una estrategia para garantizar la viabilidad a largo plazo de la marca. Desde el incendio, Schara había aplicado tres ERTE por fuerza mayor, mientras estudiaba opciones para retomar la actividad.
Schara ha asegurado que la decisión de despedir a sus empleados es "difícil pero necesaria"
Finalmente, la compañía ha decidido externalizar la producción de sus embutidos y salchichas a otras plantas, manteniendo las recetas originales y centrándose ahora en la comercialización de sus productos.
Tras los despidos, solo una quincena de trabajadores continuarán en la empresa para gestionar las áreas comerciales y administrativas. Schara asegura que la decisión, “difícil pero necesaria”, busca asegurar el futuro de una marca con más de medio siglo de historia dentro del sector charcutero catalán.
