Los Mossos d'Esquadra detuvieron durante la jornada festiva de ayer a un conductor temerario que acumulaba una veintena de antecedentes y circulaba en estado ebrio y con un neumático reventado por la A-2. Una patrulla del servicio de Tránsito de la policía catalana localizó el turismo e inició una persecución, ya que se había convertido en un peligro para el resto de usuarios.
El delincuente circulaba por la autovía como si se tratase de una película de Fast & Furious, haciendo eses y cambiando de carril y velocidad sin sentido. Los agentes que lo perseguían le ordenaron que detuviera el vehículo, pero el hombre de 46 años hizo caso omiso e incluso embistió a la patrulla policial. Finalmente, el conductor temerario abandonó la vía por la salida de Sant Andreu de la Barca, donde poco después fue detenido por las diversas dotaciones de refuerzo que llegaron.
El conductor triplicaba la tasa máxima de alcoholemia permitida
Tal y como ha informado El Caso, al detener al individuo los agentes comprobaron que acumulaba cerca de una veintena de antecedentes. A pesar de ello, el hombre de 46 años no puso nada fácil la tarea de los policías, ya que los volvió a embestir, provocando graves daños en la parte frontal del vehículo de la policía catalana.
Al salir del vehículo, el conductor temerario fue sometido a la prueba de alcoholemia, donde dio 0,77 triplicando la tasa máxima permitida. Además, el hombre no tenía vigente el carnet de conducir, por lo que fue detenido por los delitos de conducir bajo los efectos del alcohol, daños, atentado contra los agentes de la autoridad, resistencia y desobediencia a los agentes, negarse a la segunda prueba de alcoholemia y conducir sin carnet.
Por suerte, la operación terminó sin heridos, tanto por parte de los demás conductores de la vía como de los mismos agentes que participaron en la intervención. Igualmente, el conductor detenido pidió acudir a un hospital, aunque no había presentado ninguna herida. A pesar de ello, los agentes lo trasladaron y lo custodiaron en el Hospital de Martorell después de protagonizar una persecución que convirtió la A-2 en una película de acción.