Los barceloneses se han refugiado de las temperaturas en plena segunda ola de calor del verano, en un lunes con mínimas de 28,6 °C y máximas de 33,1 °C, según el Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat). "La ciudad es insoportable", ha lamentado a la ACN Paqui, vecina del Maresme que ha ido a Barcelona a pasar el día. Andresa, que lleva viviendo un año y medio en la capital catalana, explica que es "imposible vivir en Barcelona con este calor" y opta por refrescarse en locales con aire acondicionado, ya que en su piso no tiene. Las familias también buscan alternativas a la piscina y la playa, o también a los espacios de juegos de agua habilitados en el Parc de les Glòries, aunque aspiran a que en un futuro sean más grandes y con más sombra.
La Generalitat mantiene activada la alerta del Plan de Protección Civil (Procicat) por calor muy intenso diurna y nocturna, principalmente en la mitad sur y oeste del país, y que se puede alargar hasta el martes por la noche. Ante este escenario, los barceloneses optan por refrescarse en la playa, pero también en las zonas habilitadas en la ciudad. Es el caso de Victoria, que en declaraciones a la ACN, confiesa que a ella y a su familia les ha dado "pereza" ir a la piscina y, por este motivo, han visitado el espacio de juego de agua en el Parc de les Glòries. "Hacen falta más zonas como esta", ha reclamado.
También lo ha hecho Silvia, madre de dos niñas de 6 y 2 años, que las ha llevado al parque para salir de casa y remojarse, aunque echa de menos un espacio de sombra para proteger a los pequeños también del sol. Coincide con Roger Vila, que ha estado poco rato en el espacio con su hija por este motivo. Sin embargo, personas como Sergio, de Navarra y en Barcelona de visita, ha celebrado que existan estas opciones en la ciudad. "En Navarra no hay parques acuáticos como este", ha remarcado, y también ha opinado que no recuerda un verano en Barcelona con tanto calor.
Muchos bañistas y pocos deportistas en la playa de Nova Icària
A mediodía, el termómetro marca 32 °C en la playa de la Nova Icària, pero la humedad del 70% hace que la temperatura de sensación se aproxime a los 40 °C. Muchos bañistas se reúnen en la arena, mayoritariamente bajo sombrillas o al menos ataviados con gorras y viseras, y pocos deportistas se atreven a correr por el paseo Marítimo. En el espacio de gimnasio al aire libre, solo dos personas utilizan las máquinas para hacer algunas 'dominadas' o un poco 'de escaleras'. Las terrazas de los bares también se encuentran vacías y los pocos clientes se reúnen en el interior aprovechando el aire acondicionado.
El Servei Meteorològic de Catalunya (SMC) prevé que el pico de la ola de calor sea este lunes por la tarde, cuando se podrán llegar a superar localmente los 43 °C en algún punto de las comarcas de Ponent, las Terres de l'Ebre o en el Prepirineo Occidental. El Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) ha atendido este fin de semana a un total de 61 personas con afectaciones relacionadas con el calor.
