El Ayuntamiento de Barcelona ha defendido la "libertad creativa" del autor del cartel de la Mercè, Lluís Danés, y ha asegurado que "en ningún caso" se ha inspirado en ningún motivo o figura religiosa para diseñarlo. El consistorio del socialista Jaume Collboni sale así al paso de las críticas que la ilustración ha suscitado en el Arzobispado de Barcelona, que en un comunicado ha considerado que se utilizan de manera "irreverente" formas religiosas con la intención de "ridiculizar" la imagen de la Virgen María. El Ayuntamiento se ha remitido a una explicación del mismo artista según la cual el cartel representa "un artefacto poético, inclusivo, respetuoso y festivo que quiere conectar con todo el mundo, sin excepciones ni barreras, a través de la emoción y la belleza".
Danés también ha explicado que la obra "no quiere transmitir ningún mensaje cerrado ni excluyente", sino que tiene la intención "clara de abrir, sumar, emocionar, invitar". También subraya que "no hay dogma ni símbolos ambiguos. Sólo la voluntad de celebrar la cultura como un espacio de libertad y de convivencia".
La diócesis, en cambio, ha expresado la "sorpresa" por el uso de elementos religiosos y ha hablado de la referencia a un retablo y a una corona que, dicen, alude a la Virgen María. "En democracia se deben respetar los sentimientos del prójimo", dicen desde la Iglesia de Barcelona.
