El Ayuntamiento de Barcelona inicia el próximo martes la urbanización de la calle Marina en el tramo comprendido entre las calles Mallorca y Provença, la plaza de Gaudí y la fachada del Nacimiento de la Sagrada Familia. El objetivo de la actuación es crear un gran espacio para albergar una plaza frente a la basílica, que será, además, extensión del parque. Las obras, de ocho meses de duración, se realizarán por fases para minimizar molestias al vecindario. Se trata de una de las actuaciones del Plan de Acción del Espacio de Gran Afluencia de la Sagrada Familia para despejar el espacio público, regular los flujos de visitantes, impulsar la diversidad comercial de proximidad y recuperar espacios para las actividades vecinales. El presupuesto previsto es de poco más de dos millones de euros.
En total se actuará sobre 6.200 metros cuadrados y las actuaciones se han dividido en tres etapas. Comenzarán por las dos aceras de Provença y Mallorca con una primera fase, de dos meses de duración, donde se mantendrá la afectación actual del carril bus de Mallorca y se afectará parcialmente el carril bici bidireccional de Provença, sin cortar la circulación. Después se atacará la parte central de la plaza Gaudí. En esta segunda fase de ocupación de la plaza se dejará la acera actual para permitir el paso al vecindario y a las personas que tengan la entrada comprada para acceder al templo.
Según el consistorio, el nuevo proyecto ayuda a resolver un espacio donde se hace difícil la conciliación de usos entre los visitantes al templo y el vecindario. La intervención crea una doble isla continua, similar a otros espacios singulares del Eixample como en la Universidad de Barcelona, el Hospital Clínic o la Model, y genera una gran superficie libre que une la plaza de Gaudí con las escaleras de acceso al Templo de la Sagrada Familia.
La idea del proyecto se inspira en la propuesta que Rubió i Tudurí realizó en 1977 para la actual plaza de Gaudí. Su planta introduce un trazado circular que modifica el vial de la calle de la Marina y lo aleja de la fachada del Templo, un trazado que actualmente solo se mantiene en el límite entre el parterre y la acera.
