La ministra, Ester Molné, asegura que el Gobierno de Andorra conocía el problema de la falta de stock de pasaportes desde abril

El Gobierno realizó una demanda urgente de 12.000 pasaportes, pero la falta de policarbonato retrasó su producción

01 de septiembre de 2025 a las 19:43h

En una respuesta escrita firmada por la ministra de Justicia e Interior, Ester Molné, publicada este lunes en respuesta a una pregunta formulada por la presidenta del grupo parlamentario de Andorra Endavant, Carine Montaner, el pasado 2 de junio, se ha informado de que ya a finales de marzo y principios de abril de 2025, la Unidad de Nacionalidad y Pasaportes detectó una grave falta de stock de pasaportes y alertó al Gobierno de esta situación.

Ante esta situación y al detectar la falta de pasaportes, el ejecutivo hizo un pedido urgente de 12.000 libretas, pero el proveedor avisó de que un componente clave, el policarbonato de las páginas de datos, no estaría disponible hasta finales de julio. Un hecho que retrasó la producción aproximadamente hasta agosto.

Cabe recordar que el 22 de junio de 2022, el departamento de Sistemas de Información firmó un contrato con la UTE OeSD INternational y Pangea DW LTD, adjudicataria del concurso internacional para la renovación integral del sistema de gestión y personalización del pasaporte andorrano. Este contrato concluía la compra de 20.000 libretas con el objetivo de que el stock fuera suficiente hasta diciembre de 2027, basándose en una emisión anual aproximada de 4.000 pasaportes. Sin embargo, a finales de marzo de 2025 se constató que solo quedaban 2.800 pasaportes ordinarios y 700 diplomáticos. En los últimos dos años y cuatro meses, se habían emitido 15.700 pasaportes ordinarios y 135 diplomáticos, muy por encima de la previsión inicial. Concretamente, se entregaron 3.600 pasaportes en 2023, 9.169 en 2024 y casi 3.000 durante los primeros meses de 2025.

El incremento inesperado en la demanda de pasaportes llevó a hacer un pedido urgente de 12.000 libretas al proveedor OeSD, que informó de que, debido a la falta del policarbonato necesario para las páginas de datos, la entrega se retrasaría hasta agosto de 2025 como mínimo. Para afrontar esta situación, el Gobierno implementó medidas para reducir el número de pasaportes emitidos diariamente y estableció un límite de emisiones que priorizó los casos urgentes. Finalmente, el 28 de julio se recibió una primera remesa de 6.000 libretas, que se están distribuyendo según un protocolo consensuado con el Servicio de Trámites y la empresa Espic, y se prevé que durante el último trimestre del año llegue una segunda remesa de la misma cantidad para poder normalizar completamente el servicio.