Las personas que aspiran a formar parte de la nueva promoción de agentes de policía han comenzado este lunes el proceso de selección para cubrir ocho plazas, tres de nueva creación y cinco más para cubrir vacantes correspondientes a jubilaciones y excedencias sin reserva de plaza. Se han presentado un total de 26 candidatos, de los cuales dieciocho son hombres y ocho, mujeres.
Las primeras pruebas que deben afrontar son las físicas, que han dado el pistoletazo de salida por la mañana con el circuito de resistencia, habilidad y fuerza. Un primer test que ha tenido lugar en el Estadio Comunal Joan Samarra Vila y que ha consistido, tal y como ha explicado el agente mayor del Grupo de Formación, Bruno Modesto, en nueve ejercicios en un recorrido que combina los obstáculos con varias vueltas al estadio.
Los hombres deben conseguir completar el circuito en menos de trece minutos y medio y las mujeres, en menos de dieciséis. Se trata, ha apuntado Modesto, de pruebas que, a lo largo de los años, "se han ido actualizando y adaptando a la evolución del trabajo policial" con baremos que son "un estándar en el ámbito europeo para una condición física que debe ser media-alta" para poder desarrollar la tarea policial. Un trabajo en el que la vocación de servicio público es esencial, ha añadido el agente mayor del Grupo de Formación.
El miércoles por la mañana será el turno de la prueba de montaña, un recorrido de una distancia de aproximadamente 1.500 metros, con un desnivel de unos 200 desde el albergue de la Comella hasta un punto situado en el camino del Bosc Negre. Por la tarde se enfrentarán al test de resistencia, una prueba que consiste en hacer el máximo de vueltas posibles a la pista de atletismo de 400 metros en un tiempo que no supere los doce minutos.
Candidatos y candidatas deberán superar, a continuación, las pruebas profesional y cultural, así como los exámenes de idiomas, los tests psicotécnicos y una entrevista final.
Entre los diversos requisitos que deben cumplir las personas que se presentan a agente de policía destacan ser mayor de edad, tener la nacionalidad andorrana, el título de bachillerato o un diploma equivalente, disponer del diploma de catalán de nivel B2, estar libre de antecedentes penales. En cuanto al permiso de conducir andorrano B2, sigue siendo un requisito de obligado cumplimiento, pero se permite que los futuros agentes se lo puedan sacar durante el período de formación. Desde esta última convocatoria, se ha eliminado el requisito de la altura mínima, tanto para hombres como para mujeres.
Los y las aspirantes que superen las pruebas de acceso, deberán pasar una formación inicial de una duración máxima de nueve meses. Una vez hayan completado esta formación, serán nombrados, durante un año, agentes de Policía en período de prueba. Esta será la 60ª promoción.