El grupo parlamentario de Junts ha puesto sobre la mesa una nueva ofensiva para desbloquear una de las reivindicaciones históricas del sur del país: el desdoblamiento de la N-340 entre Alcanar y L'Hospitalet de l'Infant. La diputada Irene Negre ha registrado en el Parlament una propuesta de resolución que insta al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible a redactar, de manera urgente, un estudio que permita transformar este tramo en una autovía A-7 de cuatro carriles. Esta vía ya cubre el tramo entre Altafulla y L'Hospitalet de l'Infant, convirtiéndose no solo en una alternativa, sino en la principal vía de conexión de este territorio, por encima de la AP-7.
Según Negre, la situación actual es “inasumible” para el territorio. Denuncia que la N-340 se ha convertido en una vía “lenta y prácticamente inútil”, marcada por una línea continua permanente que imposibilita cualquier adelantamiento durante decenas de kilómetros. Estas medidas, impuestas para reducir la siniestralidad en un momento de fuerte accidentalidad, ya no se ajustan —dice— al nuevo escenario derivado del fin de los peajes.
La propuesta recuerda que la carretera ha acumulado, entre 2010 y 2025, 36 muertos, 56 heridos graves y más de 400 heridos leves, convirtiéndola en uno de los puntos negros más persistentes de las Terres de l’Ebre y el Baix Camp. Sin embargo, los datos aportados por el Govern muestran que los accidentes graves han caído de manera notable desde 2019, coincidiendo con la gratuidad de la AP-7 y con las regulaciones de tráfico introducidas entonces. Para Junts, es la prueba de que es necesario “actualizar criterios” y recuperar operatividad.
Negre defiende que el desdoblamiento es imprescindible para evitar episodios de aislamiento territorial. “Cuando la AP-7 se colapsa —por accidentes, obras o saturación— todo el sur del país queda desconectado. No puede ser que Cataluña dependa de una sola vía troncal. La N-340 tiene que ser una alternativa real”, asegura.
Por eso, la diputada exige al Ministerio que asuma “de una vez por todas” sus responsabilidades y garantice en las Terres de l’Ebre y en el Camp de Tarragona unas infraestructuras “a la altura de lo que merecen”. “No puede ser que mantengamos una carretera infrautilizada mientras el territorio continúa expuesto al colapso”, concluye.
