La Ràpita dispondrá de un nuevo instituto de secundaria entre los años 2028 y 2029, con una capacidad prevista para 825 alumnos. El Ayuntamiento y el Departamento de Educación han firmado este domingo un protocolo de actuación que fija los pasos a seguir para que el municipio cuente con un segundo centro de secundaria.
Según han explicado el alcalde de la Ràpita, Javier Reverté, y la concejala de Educación, Esther Niubó, el consistorio se encargará de los trámites administrativos y adelantará los cerca de 11 millones de euros que se calcula que costará la obra, un gasto que posteriormente será devuelto por el Departamento de Educación. "Es un día de alegría. Este instituto es una necesidad", ha destacado Reverté. Una vez el edificio esté terminado, la voluntad es que los dos institutos del municipio funcionen simultáneamente.
La construcción del nuevo centro responde a una reivindicación histórica del municipio y permitirá descongestionar el actual instituto Alfacs, que hace años se ha quedado pequeño. El centro se proyectó inicialmente para 350 alumnos, pero actualmente tiene unos 800, algunos de los cuales estudian en barracones. Además, hace un año se produjo un desprendimiento de piedras en una cantera cercana, hecho que obligó a suspender las clases durante unos días
Aun así, Reverté ha subrayado que el nuevo instituto no se construye “por una cuestión de seguridad”. A pesar de ello, ha avanzado que se encargará un nuevo estudio de los terrenos escogidos para asegurar que no exista ningún riesgo. "Esta psicosis que estamos viviendo la tenemos que apartar", ha señalado el alcalde. El futuro centro se ubicará en la zona oeste del municipio, junto a la avenida Catalunya
En cuanto a la financiación, el alcalde ha explicado que ya se han mantenido conversaciones con el Institut Català de Finances y con diversas entidades bancarias, y ha afirmado que este aspecto no le preocupa gracias a la buena "salud en las arcas municipales". También ha avanzado que se han iniciado contactos con empresas constructoras, ya que la intención es que el edificio sea de construcción modular, un sistema que permitiría agilizar los plazos de ejecución. "Intentaremos ser el mejor instituto de Cataluña en el momento en que se haga. Que sea totalmente sostenible, sin huella de carbono", ha detallado Reverté.
La oferta de ciclos formativos todavía no está definida. Tanto el alcalde como la consellera han defendido que los estudios que se impartan estén alineados con la estrategia económica del municipio y de las Terres de l’Ebre, así como con la demanda de la juventud y las necesidades del sector productivo. "Tenemos que retener y atraer talento, sabemos qué familias educativas debe haber, basadas en la economía circular", ha especificado Niubó.
