Jordi Jordan i Farnós (Tortosa, 1983), deja la alcaldía a principios de enero, tal como se acordó a raíz del pacto entre Movem Tortosa – PSC y ERC, y tomará el relevo la hasta ahora concejala de Cultura, Mar Lleixà. Jordan continuará en el Ayuntamiento, pilotando el gobierno municipal como primer teniente de alcalde. Con él hablamos de los proyectos realizados y también de los que lo serán en el futuro.
Quedan pocos días para el relevo en la alcaldía. ¿Cómo ha sido este viaje?
Dos años y medio intensos, trabajando mucho, sentando las bases de un modelo de ciudad con más servicios de calidad, que se ocupa de la convivencia y la seguridad, que defiende su patrimonio como una oportunidad de futuro y que vuelve a estar abierta al río, generando dinamismo económico. En los terrenos de RENFE construiremos el aparcamiento más grande de las últimas décadas, ampliaremos el Auditorio y apostaremos por las viviendas públicas en los barrios de El Castell, Ferreries y El Temple. Además, también hemos iniciado las obras de los ascensores del Hospital y pronto se reanudará la ampliación del HUTVC.
La mejor acción para Tortosa ha sido...
Todas las acciones relacionadas con la recuperación de las fortificaciones y la candidatura de Patrimonio Mundial de la UNESCO, que deben sentar las bases de esta Tortosa que mira su pasado, pero no con nostalgia, sino con ilusión de cara al futuro. Estamos haciendo la mayor rehabilitación en murallas, únicas en el país.
Siempre nos dice que no se va a ningún lado y que continuará presente. ¿Cuál será o en qué consistirá este nuevo papel a partir de enero?
Seré el primer teniente de alcalde y los siete concejales de Movem y PSC continuaremos siendo mayoritarios dentro del gobierno, con los 3 de ERC, estando presentes en el día a día del Ayuntamiento. Todas las políticas que estamos llevando a cabo están consensuadas y, por lo tanto, habrá una continuidad en todo lo que estamos elaborando. Con relación al cartapacio, después del relevo en la alcaldía también se producirán cambios.
¿Podríamos decir que, siendo historiador, ser concejal de Cultura es lo segundo mejor que le podría pasar después de haber sido alcalde?
Después de haber sido alcalde, podría asumir cualquiera de las carteras, pero, evidentemente, la de Cultura, por lo que representa para Tortosa, es una concejalía que asumiré con mucha ilusión por todo lo que supone la promoción de nuestro patrimonio histórico. Como concejal de Deportes, impulsaremos la reforma de los pabellones, la grada y los vestuarios del campo de fútbol. Además, en 2026 iniciaremos la nueva pista de atletismo en Jesús.
¿Y en las próximas elecciones municipales, cómo le gustaría que la ciudadanía lo valorase?
Como una persona cercana que, durante dos años y medio, ha puesto las bases de una Tortosa que defiende su patrimonio histórico, que se ha abierto al río como herramienta de desarrollo, que ha apostado por servicios públicos de calidad como las guarderías o el hospital, que quiere hacer de Tortosa una ciudad con más calidad de vida. También que hemos puesto el foco en la convivencia y la seguridad, con más presencia policial en la calle, que ya se ha empezado a notar con la reducción de los delitos e impulsando la Ley de Barrios.
¿Qué novedades nos puede explicar del Circuit Verd de les Muralles y las nuevas obras en el Castell de la Suda?
Se está haciendo la mayor inversión de la historia, de 4 millones de euros, por parte del Estado, en la recuperación del Castell de la Suda. Habrá un nuevo acceso a la zona de Remolins, detrás de la pista polideportiva, donde está la oterna del general Ortega. Desde allí, los turistas podrán subir al Castillo por la parte norte del Rastre, por una nueva pasarela, y accederán directamente a la cafetería. Se recuperan las galerías subterráneas del pozo, los antiguos altos hornos y prisiones, que también se abrirán al público. En una visita al Parador de Turismo, el ministro de Turismo, Jordi Hereu, anunció también una rehabilitación integral del hotel, que supondrá un total de 10 millones de euros.
Desde el Ayuntamiento, hemos creado el Circuito Verde de las Murallas, que es un recorrido por las fortificaciones desde la Torreta hasta el fortín de Orleans. Se podrá recorrer a pie o en bicicleta eléctrica, habrá nuevas indicaciones y aparcamientos. La ruta pasará por el fortín de Bonet del siglo XVII que, recientemente, ya se ha adjudicado la obra para hacer una rehabilitación integral. Además, musealizaremos las Avanzadas de Sant Joan, con figuras del Sitio de Tortosa en las cavidades interiores, una maqueta, plafones explicativos y siluetas metálicas. El Circuito Verde también dispondrá de un tren turístico eléctrico, rojo y negro, que recuerda la antigua locomotora de vapor de Lo Carrilet, que hacía el trayecto entre Tortosa y La Cava. Un proyecto de ciudad importantísimo, que va ligado a la candidatura de la UNESCO.
Recientemente, se han inaugurado las dos guarderías municipales. Una reivindicación histórica, ¿verdad?
Sí, era una reivindicación vecinal de las Asociaciones de Vecinos de Ferreries y del Temple, desde hace más de 40 años. Ha habido muchas promesas, muchos gobiernos y muchos intentos, pero nosotros en dos años y medio hemos conseguido construir dos edificios modélicos, altamente sostenibles, modernos, diáfanos... Uno a cada lado del río y generando una mejora educativa de los 0 a los 3 años, que es un hecho histórico también por el poco tiempo en que se ha hecho. Estamos muy contentos de poder hacer realidad estos nuevos centros educativos, que mejorarán también la conciliación familiar de los jóvenes y de las mujeres.
¿Qué supondrá para Tortosa el proyecto de la Zona de Ocio en el río?
En el antiguo emplazamiento del Club de Remo haremos una gran rotonda que mejorará la circulación actual, con una fuente central. Se suprimirá uno de los dos carriles de la avenida Lleida en dirección al Auditorio, ya que, por allí pasará el carril bici que enlazará los tramos ya existentes del paseo de Ribera y de la Vía Verde del Pont Roig. La reordenación del tráfico también afectará a los aparcamientos entre las escaleras del Pont Roig y el embarcadero del Mercado. Allí se ubicarán unas zonas verdes ajardinadas con surtidores de agua y la estación del nuevo trenecito turístico. Los aparcamientos se trasladarán justo enfrente y en batería, en un espacio que ahora estaba ocupado por unas islas ajardinadas y una isla de contenedores de basura selectiva.
Los contenedores se trasladarán al lateral de la C/Artur Anguera. Junto a las letras de Tortosa se ubicará un quiosco de venta de tiques del catamarán turístico Lo Sirgador. Habrá una churrería, durante el invierno, y una heladería, durante el verano. Y, más allá, frente al otro puerto fluvial de la Generalitat, se instalará un quiosco de grandes dimensiones con una pérgola y terraza exterior que podrá ser un bar de copas y tapas. La obra tendrá un coste de 856.160€ y se ejecutará en cuatro meses, para inaugurarse de cara al verano.
¿Estáis esperanzados con la llegada del Plan de Barrios?
Sí, para nosotros la Ley de Barrios es el proyecto más importante para Tortosa de las últimas décadas. Estamos muy orgullosos de haberlo podido presentar y que nos lo hayan otorgado. Se estructura en tres grandes ejes: transformaciones físicas, acción sociocomunitaria y transición energética. Afectará a los barrios del Centre-Nucli Antic, Remolins, Rastre, Castell, Garrofer y Santa Clara. Entre los proyectos destacados se encuentran la mejora de la avenida de la Generalitat; 1,5 ME para la rehabilitación de viviendas y las 22 viviendas en la C/ Sant Felip Neri, de 4 ME, destinadas a gente joven, gente mayor o movilidad reducida; la recuperación de la piscina de los Josepets como refugio climático y parque de aguas; recuperar la plaza de Sant Joan creando un centro cívico en la antigua iglesia; crear espacios de sombra y rehabilitar la plaza de Sant Jaume, la C/ Sta. Anna, C/ Montcada... y el refuerzo de las actividades culturales con la creación del nuevo festival Vèrtebra, la nueva versión del Deltebre Dansa, de Roberto Oliván, y el Centro de Creación Artística y Residencia de Artistas Internacionales de los Josepets.
Estuvo en Vilafranca del Penedès para formar parte de esta prueba piloto para la revitalización de las zonas comerciales del Casco Antiguo de la ciudad...
Tenemos acciones de videovigilancia en la zona comercial, la redacción del plan de usos para definir qué comercios se pueden abrir y cuáles no, para evitar la saturación o desertización de algunas calles, la dinamización comercial y promoción de los espacios vacíos.
Como padre, ¿qué Tortosa quiere dejarle a su hija y a las futuras generaciones?
Una Tortosa abierta al río, que mire su patrimonio con orgullo y una Tortosa con más servicios de calidad.
Cuando le preguntan por Tortosa desde Barcelona, u otros puntos de Cataluña, ¿qué les explica?
Que es la capital del sur de Cataluña, una ciudad de cruce con Aragón y el País Valenciano, que tenemos un patrimonio histórico espectacular y que es una ciudad ideal para vivir.
¿Se identifica con lo de la política útil?
Evidentemente que sí, porque solo en un año y medio hemos hecho que ahora haya servicios, como las guarderías, que antes no existían.
Tortosa ha dado un giro en la recuperación de la memoria histórica. ¿Es su grano de arena para revertir el auge de la extrema derecha? ¿Y qué haremos con el monumento franquista?
La memoria democrática es imprescindible para no repetir los errores del pasado. Cuando hay discursos totalitarios que defienden razas o deshumanizan colectivos... acaban mal. Hay que recordar lo que representó la dictadura franquista con estos postulados radicales y continuar trabajando para poner en valor la democracia que, a pesar de sus deficiencias y errores, es el mejor sistema para garantizar una convivencia entre las personas, más allá de nuestras ideologías. Sobre el monumento, estamos a la espera de la resolución judicial, para saber si la Generalitat lo retira o no.
Si fuera un niño... ¿qué tres deseos escribiría en la carta a los Reyes de Oriente?
Pediría que hubiera más Paz en el mundo, pero también en las ciudades, pidiendo más convivencia y buscando siempre aquello que nos une antes que lo que nos separa. Más allá de pedir algún juguete, como todos los niños. Ahora bien, si hablamos de Tortosa, lo que pido es que se nos conceda la Ley de Barrios.
Se acusa a menudo a los políticos de no cumplir las promesas. ¿En qué porcentaje las ha intentado cumplir?
No hablaría de un porcentaje. En un año y medio no puedes cumplir todo el programa y, de hecho, en la campaña electoral ya explicamos que nuestro proyecto era para ocho años. Por lo tanto, hay cosas que hemos hecho en un tiempo récord, pero estamos sentando las bases de un proyecto que necesita poder acabar este mandato y repetir otro para desplegar realmente nuestro modelo de ciudad.
¿Qué valores cree que necesita un alcalde?
Proximidad, empatía y tener una visión de futuro pero, a la vez, también pragmática de nuestro día a día.