El Grupo Padesa, uno de los principales referentes del sector avícola en el Estado, afronta un posible cambio de propiedad que podría marcar un punto de inflexión en su trayectoria. Un consorcio internacional encabezado por el grupo portugués Lusiaves, ha iniciado negociaciones para adquirir el grupo con sede en Amposta (Montsià), según han confirmado fuentes del sector al diario 'Expansión' y al 'Diari de Tarragona'.
Las conversaciones se encuentran en una fase avanzada después de que el consorcio haya obtenido la exclusiva para analizar el negocio y la situación financiera de Padesa. Este periodo de análisis previo, habitual en operaciones de esta envergadura, debería permitir concretar los términos definitivos de la posible compraventa. La transacción, si acaba prosperando, no se formalizaría antes del cierre del año 2025 y situaría la valoración del grupo en una horquilla de entre 350 y 400 millones de euros.
Cerca de 1.200 trabajadores
El proceso se ha desarrollado mediante un concurso competitivo en el que han participado diversos actores del sector avícola, tanto del Estado como internacionales. La coordinación de la operación ha corrido a cargo de DC Advisory y, según ha trascendido, la alianza liderada por Lusiaves ha sido la que ha despertado más interés entre los accionistas. En el ámbito de los asesores, el despacho Ceca Magán da apoyo a la parte compradora, mientras que EY trabaja al lado de Padesa.
Actualmente, el capital de Padesa se reparte principalmente entre dos familias. La familia Centelles controla el 40% del grupo a través de la sociedad Inversiones Cenmor, mientras que la familia Martorell ostenta otro 40%. El 20% restante corresponde a otros accionistas.
El grupo da empleo a cerca de 1.200 personas, concentradas sobre todo en sus tres principales sociedades: Pavo y Derivados SA, Piensos Procasa y Avifood.
Una de las empresas tarraconenses con mayor volumen de facturación
Nacida en 1978 en Amposta, Padesa ha crecido hasta convertirse en uno de los grandes productores de carne de ave en España. Es el tercer operador en carne de pollo y el segundo en pavo, y se sitúa entre las empresas con más volumen de facturación de la demarcación de Tarragona, con ingresos anuales que superan los 500 millones de euros.
Uno de los rasgos distintivos del grupo es su alto grado de integración vertical. Padesa controla todas las etapas del proceso productivo, desde la reproducción e incubación hasta la cría de los animales en más de 300 granjas, la fabricación de piensos, el sacrificio, la transformación y la comercialización. Esta estructura le permite operar con una elevada capacidad industrial y distribuir sus productos bajo la marca Aldelís, tanto en carne fresca como en elaborados
La eventual entrada de un consorcio internacional con peso en el sector podría reforzar la posición de Padesa dentro del mercado europeo y abrir una nueva etapa de crecimiento, aunque, de momento, la operación continúa sujeta a las negociaciones y a la evolución del análisis en curso.
