Esta mañana, el alcalde de Tortosa, Jordi Jordan; el concejal de Educación, Víctor Grau; la concejala de Servicios, Marga Abelló; la concejala de Promoción Económica, Pilar Caballé; y el director de la Escuela de Ferreries, José Carlos Arasa, han visitado las instalaciones de la Escuela de Ferreries, ya que, recientemente se han efectuado una serie de mejoras. En este caso, se ha instalado una valla perimetral en la parte posterior del patio, dado que no había y los niños podían tener acceso a la zona del aparcamiento de vehículos o, incluso, alguno había intentado escaparse. Además, también se han repintado las líneas de la pista de baloncesto, se ha arreglado la cubierta y se han cambiado ventanas, fluorescentes y persianas. Próximamente, también se deberán hacer obras en la fuente del patio.
Así lo ha explicado Jordan a los medios de comunicación, destacando que “es una de las escuelas donde hemos llevado a cabo el plan de mantenimiento de los centros educativos de la ciudad y que consiste en un proyecto transversal con diversas áreas del Ayuntamiento implicadas”. El plan se seguirá llevando a cabo durante todo el año que viene y se han detectado muchas pequeñas acciones que hacían necesaria la actuación del Ayuntamiento. En estos pasados presupuestos ya se destinó una partida presupuestaria de 50.000€ para poder hacer todas estas mejoras y también se obtuvo una subvención del SOC para disponer de varias personas que estaban en paro, y de más de 30 años, que a través de una formación han podido actuar en estas obras en diez centros diferentes. “Unas obras que no son muy relevantes ni crean grandes infraestructuras para presentar a nivel político, pero unas medidas que son muy necesarias e importantes para poder tener unas escuelas más seguras donde todo el mundo pueda disfrutarlas”, ha remachado Jordan.
Por su parte, el concejal de Educación, Víctor Grau, ha explicado que “se ha trabajado de manera coordinada con el Consejo Escolar y todas las direcciones del centro”. En la Escuela de la Mercè se ha realizado una intervención en la azotea y en la cubierta donde se han sustituido tejas dañadas y filtraciones de agua. En la fachada exterior se han reparado paramentos de ladrillo y grietas y se han colocado zócalos cerámicos en los pasillos. Se han cambiado desagües y corregido desniveles de la pista deportiva.
En la Escuela de Remolins se ha rehabilitado todo el centro en general, se han pintado vallas y ventanas, se han colocado protecciones exteriores y se han corregido desniveles que provocaban inundaciones en la pista polideportiva. También se ha mejorado el sistema de calefacción y una intervención parcial en la muralla perimetral que han tenido que hacer desde la brigada.
En la Escuela de Els Reguers se ha ejecutado una actuación para la seguridad de los espacios y una intervención en las paredes a través de los fondos Next Generation que se explicará en detalle más adelante, al igual que se ha hecho también en la Escuela Divina Pastora de Vinallop.
En cuanto a la Escuela de Sant Llàtzer, se ha nivelado el patio, y en la Escuela Cinta Curto se ha hecho un nuevo cierre perimetral y se han solucionado unos problemas de humedades.
Finalmente, la concejala de Promoción Económica, Pilar Caballé, ha explicado que estas actuaciones han sido posibles de realizar gracias a un taller ocupacional especializado en el mantenimiento de equipamientos municipales en los barrios, coordinado desde el área del SOC de Tortosa Activa y financiado por el SEPE del Ministerio de Trabajo. Desde el primer día se combinó la formación en el aula con las prácticas externas y que tengan un primer contacto de trabajo real y la creación, también, de un huerto urbano como práctica. Los alumnos recibieron formación de: albañilería, alicatados, pintura, fontanería o seguridad laboral. Todo esto permite que las personas ocupadas del taller puedan aplicar todos los conocimientos que han adquirido y que se favorezca un aprendizaje práctico. Se prevé que de cara al curso 2026-2027 vuelvan a repetirse este tipo de programas formativos.