Los Mossos d’Esquadra han detenido a un hombre de 29 años acusado de tres delitos contra la seguridad vial y atentado contra los agentes de la autoridad, tras una espectacular fuga policial que empezó en un control de alcoholemia en la C-244, en la Pobla de Claramunt (Anoia).
Los hechos tuvieron lugar la madrugada del 1 de noviembre, cuando los agentes ordenaron a un vehículo que se detuviera. El conductor, sin embargo, hizo caso omiso de las indicaciones y huyó a gran velocidad dirección Vilanova del Camí, iniciando una persecución que acabó con escenas de peligro extremo.
Durante la huida, el copiloto saltó del coche para intentar escaparse, pero el conductor dio marcha atrás y le pasó por encima de las piernas, continuando su huida sin detenerse. Uno de los agentes atendió al herido, mientras el otro continuaba el seguimiento del vehículo, que circuló en sentido contrario, chocó contra contenedores y otros coches e incluso embistió a un vehículo policial.
La persecución acabó en Jorba, donde el fugitivo perdió el control del coche y quedó atrapado en un talud. Los Mossos lo detuvieron al momento.
Al hacerle la prueba de drogas, dio positivo en cocaína y THC, y se descubrió que nunca había obtenido el permiso de conducir. El hombre acumula 32 antecedentes policiales y, además, se le relaciona con una tentativa de robo con fuerza cometida el 29 de octubre en una clínica veterinaria de Vilanova del Camí, de donde huyó tras romper el cristal de entrada y ser sorprendido por unos testigos.
El detenido pasó el lunes a disposición judicial.