El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha instado este miércoles al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a no actuar contra la flotilla Global Sumud, que se dirige hacia Gaza con cerca de un millar de personas a bordo en una misión humanitaria. Según el jefe del ejecutivo, la iniciativa “no supone ningún peligro ni amenaza para Israel” y sólo pretende llevar ayuda a la población palestina.
Sánchez ha remarcado que la misión se ha puesto en marcha a raíz de la negativa del gobierno israelí a permitir la entrada de UNRWA y el reparto de ayuda humanitaria en la Franja. “Los españoles que participan contarán con toda la asistencia diplomática necesaria”, ha dicho el presidente, que ha añadido que el Estado mantiene contacto permanente con la flotilla y con los países que también tienen representación.
El gobierno español ha desplegado la fragata Furor en la zona con el objetivo de dar apoyo y asistencia en caso de emergencia, pero ha confirmado que el barco no entrará en la zona de exclusión marítima establecida por Israel frente a la costa de Gaza. Sánchez ha hecho estas declaraciones antes de asistir a la reunión informal de jefes de Estado y de gobierno de la Unión Europea en Copenhague, donde también ha avanzado que se abordará el futuro de Ucrania, los retos de la defensa europea y el impacto de la emergencia climática.
Díaz: “Sus vidas corren peligro y España debe apoyarlos”
La vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, también ha querido mostrar apoyo a la misión y a los españoles que participan. En una rueda de prensa en Madrid, ha calificado la flotilla de “ejemplo absoluto de cooperación y respeto a la legalidad internacional” y ha exigido a la Unión Europea que garantice la protección de los integrantes ante cualquier acción de Netanyahu.
“Sus vidas corren peligro y nuestro país debe apoyarlos. Son españoles y deben estar protegidos”, ha remarcado.
Robles: la misión es “importante”, pero con riesgos
Desde Barcelona, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha confirmado que el Furor tiene “perfectamente monitorizada” la situación de la flotilla, aunque se mantiene fuera de la zona de exclusión israelí. Robles ha reconocido el valor humanitario de la operación, pero ha hecho un llamamiento a la responsabilidad: “Existe un riesgo para las vidas de las personas que están en la Flotilla y también para el barco de la Armada”.

La titular de Defensa ha reiterado que el barco militar se quedará en aguas seguras para intervenir sólo en caso de que fuera necesario un salvamento. Durante su intervención en el Círculo de Economía, Robles también ha defendido el embargo de armas a Israel, que ha calificado de “justo y necesario”, a pesar de reconocer que representa un “reto para la industria y la tecnología española”.