El Gobierno español ha anunciado, mediante un decreto ley publicado este miércoles en el Boletín Oficial del Estado (BOE), que las personas que perciban prestaciones de desempleo quedarán exentas de presentar la declaración de la renta a partir del próximo año. Esta medida forma parte de un conjunto de iniciativas que también contempla un aumento en las pensiones.
Supresión de la obligación para los perceptores de paro
Según el texto legal, pendiente ahora de ratificación por el Congreso de los Diputados a principios de 2026, se fija expresamente que se elimina "la obligación de presentar la declaración del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a los parados", ya que esta exigencia "no supone solo una obligación formal" sino que tiene implicaciones más amplias.
Justificación oficial del cambio
Fuentes gubernamentales han explicado que desde que se instauró esta obligación, se ha comprobado que "no ha resultado adecuada", motivo por el cual se decide eliminarla a partir del próximo ejercicio fiscal. La decisión pretende simplificar los trámites administrativos para los beneficiarios de este tipo de ayudas sociales.
