Un par de turistas de 18 años y nacionalidad irlandesa fueron detenidos en Santa Ponça, en la localidad mallorquina de Calvià, después de propinar una brutal paliza a un hombre de 71 años y su nieto de 20.
Según informa el Diario de Mallorca, todo empezó en un local de tatuajes de esta localidad, cuando los dos chicos empezaron a amenazar, sin motivo aparente, a los trabajadores y a los clientes que había en el establecimiento, entre ellos, una compatriota suya y su familia. "¿Qué miras? ¿quieres pelea?".
Los empleados de la tienda acabaron echándolos, pero los dos chicos esperaron 40 minutos en la puerta del local, junto con un grupo de amigos suyos. Cuando la familia, que también era irlandesa, salió del establecimiento para volver a su apartamento, los chicos empezaron a seguirlos y cuando el nieto les pidió que los dejaran en paz, los dos jóvenes que habían protagonizado el incidente en el local de tatuajes, los apalearon violentamente a base de puñetazos y patadas.
Cuando el abuelo y el nieto cayeron al suelo, los jóvenes continuaron con los golpes. Los clientes de un restaurante cercano salieron corriendo para detener la paliza y, poco después, llegó la Policía Local, justo cuando los agresores emprendían la huida. La patrulla avisó por radio sobre los fugitivos y dio su descripción, y poco después eran detenidos.
El abuelo y el nieto, por su parte, quedaron tendidos en el suelo y heridos. El abuelo, que es quien se llevó la peor parte, tuvo que ser operado en el hospital por diversas fracturas faciales.
Los dos chicos detenidos, por su parte, fueron entregados a la Guardia Civil y puestos a disposición judicial. La fiscal pidió la prisión provisional, bajo fianza de 2.000€ y la jueza estuvo de acuerdo.
