La clínica dental privada de Alzira donde este jueves una niña de seis años perdió la vida no disponía de la autorización sanitaria necesaria para administrar sedación intravenosa, según ha confirmado este sábado la Conselleria de Sanitat. El centro solo está habilitado para tratamientos odontológicos con anestésicos locales.
La tragedia se produjo después de que la menor recibiera una sedación para la extracción de dientes de leche y empastes. Posteriormente, fue trasladada al Hospital de la Ribera en parada cardiorrespiratoria, donde los facultativos intentaron reanimarla sin éxito.
Otra niña, de cuatro años, que también había sido atendida en la misma clínica esa misma mañana, presentó fiebre, vómitos y somnolencia, y continúa ingresada en la UCI pediátrica del Hospital Clínico de Valencia en estado estable.
La propietaria del centro aseguró que la menor “salía aparentemente bien” de la clínica y que desconocen qué causó el fatídico desenlace. Mientras tanto, la Conselleria ha iniciado un expediente informativo y ha ordenado la suspensión cautelar de la actividad de la clínica mientras se investigan los hechos.
