Los Mossos d’Esquadra han abierto una investigación a raíz del accidente que se produjo este domingo en una atracción de PortAventura y que dejó catorce personas heridas.
De ellas, dos se encuentran todavía ingresadas: una de ellas sigue en estado crítico en el hospital de Bellvitge y la otra también ingresó en estado crítico en el hospital Joan XXIII de Tarragona, según han confirmado fuentes hospitalarias este lunes. El resto de afectados ya han recibido el alta.
Mientras tanto, desde el parque temático han declinado dar información sobre el siniestro alegando la investigación abierta por la policía. Desde el cuerpo han explicado que hay diligencias informativas abiertas que se trasladarán al juzgado una vez se haya terminado el informe.
Los hechos ocurrieron a las 11.25 horas en la atracción Tomahawk, una pequeña montaña rusa dedicada a los niños. Según ha detallado este lunes en ‘Catalunya Ràdio’ una de las personas que viajaba en la vagoneta que sufrió el siniestro, se encontraron el árbol ya caído a la atracción, y el tren impactó.
“La atracción arrancó con plena normalidad. Ya llegábamos al final y de lejos vimos un árbol de grandes dimensiones, no era una rama, y todo el mundo empezó a llamar. Nos estampar contra el tronco y la atracción continuó hasta el final. No hubo ningún sistema que lo detuviera ni aflojó el ritmo”, ha relatado la mujer.
Con todo, el tren no descarriló. “A nivel emocional ha sido un choque muy bestia”, ha reconocido. Asimismo, ha lamentado que la respuesta del parque hacia los afectados “no ha estado a la altura” y que “más allá del comunicado” público, no les dieron ninguna explicación.