Protección Civil ha desactivado la alerta del Inuncat por el temporal de levante y ha dado por finalizados los avisos por fuerte oleaje, intensidad y acumulación de lluvia. No obstante, el plan se mantiene en prealerta para hacer seguimiento de los caudales de los ríos de la demarcación de Girona (Ter, Tordera, Fluvià y Muga), que todavía se encuentran por encima de lo habitual. En paralelo, también hay activada la prealerta por el riesgo fuerte de aludes en el Pirineo Oriental (nivel 4 sobre 5) y se pide evitar las actividades de montaña fuera de las pistas y zonas controladas.
El episodio de levantada ha dejado más de 200 litros en puntos de Osona y el Ripollès, con máximos de 216 litros en Cantonigròs y 201,5 litros en Molló, y ha provocado unos 560 avisos a los Bomberos de la Generalitat
En las últimas 12 horas, los avisos se han reducido considerablemente (50) y se han centrado en retirar árboles o ramas caídos en la vía pública, desprendimientos en carreteras e inundaciones de agua en edificios, principalmente bajos y terrazas. La mayoría de avisos se han concentrado en la Región de Emergencias Metropolitana Norte (17) y la Región de Emergencias Tarragona (15).
A pesar de la mejora de las condiciones meteorológicas, los Bomberos continúan atentos al riesgo de aludes y este domingo se ha reforzado la unidad GRAE, con más personal de la unidad de Montaña. Se realizarán rutas preventivas de reconocimiento del territorio y seguimiento del riesgo de aludes en la Vall Fosca, la Cerdanya y el Ripollès, entre otras zonas.
El peligro es fuerte (4 en una escala de 5) en el sector Ter-Freser, en la mitad oriental de la Vertiente Norte del Cadí-Moixeró, en el sector Prepirineo y en el Perafita-Puigpedrós.
En cuanto a los caudales de los ríos, la Agencia Catalana del Agua (ACA) informa que se van normalizando, aunque en las comarcas de Girona y Osona se mantienen por encima de lo habitual. Se recomienda precaución y no acercarse a las orillas ni cruzar puntos bajos. El río Ter en Sant Joan de les Abadesses (Ripollès) todavía se encuentra en nivel alto, así como a la altura de les Masies de Roda (Osona). Además, el sábado por la noche se empezó a desembalsar agua en los pantanos de Susqueda y Pasteral, de manera gradual, con afectación prevista "nula o moderada".
Las afecciones viarias por la nevada obligan a llevar cadenas en la BV-4031 en el coll de la Creueta y para acceder a la estación de esquí de Port Ainé, mientras que la BV-4024 está cortada por el fuerte viento y la nieve en el tramo final de acceso al coll de Pal. Ayer sábado por la tarde, unos 50 vehículos quedaron atrapados por la nevada en la GIV-4016 y la GI-400 entre Toses y la Collada de Toses, en el Ripollès, y tuvieron que ser retirados con la colaboración de los Mossos d'Esquadra, Bomberos de la Generalitat y una máquina quitanieves
Durante este episodio de levante, que comenzó el día de Navidad y se ha alargado hasta este domingo, el teléfono de emergencias 112 ha recibido más de 1.000 llamadas (1.098) por 735 expedientes, con las comarcas del Barcelonès (200 llamadas), Maresme (95) y Gironès (78) como las más afectadas. Protección Civil avisa que, después de tres días de lluvia intensa, el terreno está muy húmedo y pueden producirse desprendimientos, caídas de árboles y mobiliario urbano, también en las zonas de costa por los efectos del fuerte oleaje. Además, si se han de hacer desplazamientos al medio natural, hay que ir bien equipado e informarse antes de la situación en la zona.
