La pastelería industrial, las galletas o las bebidas azucaradas desaparecerán por completo de los hospitales

El Gobierno ha confirmado su intención de retirar los ultraprocesados de los menús infantiles, cafeterías y comedores abiertos al público

26 de noviembre de 2025 a las 15:14h

El Ministerio de Derechos Sociales y Consumo ha confirmado que quiere retirar los alimentos ultraprocesados de los menús infantiles en los hospitales. Así lo ha avanzado este miércoles el ministro Pablo Bustinduy en un acto sobre obesidad organizado por el Ministerio de Sanidad y la Organización Mundial de la Salud (OMS). Según ha explicado, el real decreto que el Gobierno está preparando sobre alimentación saludable en hospitales y residencias incluirá explícitamente esta medida, dirigida tanto a los menús que se dan a niños y adolescentes ingresados como a la oferta de cafeterías y comedores abiertos al público dentro de los centros sanitarios.

El texto en elaboración establecerá criterios mínimos de calidad nutricional y sostenibilidad para la contratación y adquisición de alimentos en hospitales y residencias de ancianos. Esto implicará restringir productos de formulación industrial compleja, con ingredientes muy procesados y perfiles nutricionales pobres o desequilibrados: snacks salados, pastelería industrial, galletas, bebidas azucaradas u otros productos con exceso de grasas saturadas, azúcares o sal.

Bustinduy ha defendido que el sector público debe liderar la transición hacia entornos alimentarios saludables, y ha asegurado que esta iniciativa responde a un “clamor social y científico”. “El consumo creciente de alimentos ultraprocesados representa una amenaza sistemática para la salud pública, la equidad y la sostenibilidad ambiental”, ha remarcado.

Según el Ministerio, la medida se alinea con las recomendaciones de organismos internacionales como la OMS y UNICEF, que alertan del crecimiento constante en el consumo de ultraprocesados y de su impacto negativo en la salud infantil, el bienestar, la equidad y el entorno. Con el nuevo decreto, el Gobierno pretende avanzar hacia menús hospitalarios más saludables y reducir la presencia de alimentos que tienen un papel directo en el aumento de la obesidad y de enfermedades metabólicas.