El Departamento de Salud ha impuesto una sanción de 6.000 euros a QuirónSalud a raíz de la denuncia de una paciente que asegura haber sufrido violencia obstétrica durante su parto. Según detalla 3Catinfo, el equipo médico le habría practicado una cesárea un viernes por la tarde porque tenían “prisa” antes de encarar el fin de semana
La paciente explica que se encontraba bien y que no consideraba necesario inducir el parto. A pesar de ello, afirma que dos horas después de ingresar la condujeron al paritorio sin informarla de que le provocarían el parto y sin pedirle consentimiento. Relata que era viernes por la mañana y que “el turno acababa a las tres”. Además, denuncia que, en menos de ocho horas, le hicieron siete tactos vaginales, y que finalmente le comunicaron que no avanzaba con la suficiente rapidez y que el bebé estaba sufriendo. Aun así, según indica, en la historia clínica no consta ningún signo de sufrimiento fetal.
Salut ha conclòs que en este caso se produjo más de una infracción grave, que la inducción del parto no estaba consentida y que la cesárea no estaba justificada. La paciente actualmente sufre estrés postraumático, recibe tratamiento en el Hospital de Sant Pau. Según detalla el portal 3CatInfo, la matrona y la ginecóloga ya no trabajan en el centro hospitalario.
En los últimos tres años, en Cataluña se han registrado más de 300 reclamaciones relacionadas con violencia obstétrica. La mayoría están vinculadas al parto y al posparto, y una parte de estas han acabado comportando sanciones.
