Cataluña encadena días de temperaturas plenamente invernales y el frío, lejos de detenerse, parece dispuesto a quedarse. Tras la entrada de aire ártico que ha desplomado los termómetros y ha dejado las primeras nevadas importantes en el Pirineo, las últimas previsiones indican que solo tendremos un breve respiro entre el domingo y el lunes antes de un nuevo enfriamiento de primera categoría.
Según explican desde el portal especializado 'Meteored', los mapas muestran que de cara al fin de semana una masa de aire atlántica algo más templada barrerá parcialmente el aire más frío. Esto se notará sobre todo en las horas centrales del día, con máximas que subirán unos cuantos grados: muchas capitales de comarca volverán a superar, tímidamente, los 10 °C. Aun así, las noches continuarán siendo muy frías, con heladas generalizadas en el interior y mínimas bajo cero en puntos del llano de Lleida, altiplano central y en el Pirineo y Prepirineo.
Nueva entrada de aire frío del norte con más noches bajo cero
Esta mejora de las temperaturas entre el domingo y el lunes será, sin embargo, un puro espejismo. A partir del martes por la tarde y especialmente entre el miércoles y el jueves, los modelos vuelven a dibujar una nueva lengua de aire ártico desde el norte de Europa hacia el Mediterráneo occidental. La circulación en altura volverá a ondularse y abrirá un “pasillo” de vientos del norte y noreste directo hacia Cataluña.
Las consecuencias serían similares o incluso más contundentes que las de estos días, con una nueva caída brusca de las temperaturas, con máximas de nuevo por debajo de lo que tocaría para la época. También habrá heladas más extensas e intensas en el interior, con valores muy negativos en el Pirineo. Y posibles nevadas nuevas en alta montaña, especialmente en la vertiente norte, si se confirma suficiente humedad.
Todavía existen diferencias entre los principales modelos sobre la duración y la intensidad exacta de esta segunda helada, pero lo que sí coinciden es en la idea general: el frío no se detiene. El pequeño alivio del domingo y lunes será solo un paréntesis dentro de una secuencia de días claramente gélidos para empezar la semana que viene.
