El Palau Bofarull de Reus ha sido este jueves el escenario de una nueva reunión entre los máximos responsables de las diputaciones de Tarragona, Girona y Lleida. La presidenta tarraconense, Noemí Llauradó, ha recibido al presidente de la Diputación de Girona, Miquel Noguer, y al de Lleida, Joan Talarn, en un encuentro que se enmarca en las reuniones periódicas de coordinación entre estos organismos.
Durante la sesión de trabajo, las diputaciones han mantenido una reunión con el comisionado de la Generalitat para el impulso de las políticas de mejora urbana, ambiental y social de los barrios y villas, Carles Martí. El objetivo: coordinar esfuerzos para aplicar estas líneas de actuación en el territorio, con especial atención a los municipios de menos de 20.000 habitantes que a menudo disponen de menos recursos para impulsar proyectos de este tipo.
Las tres diputaciones han coincidido en la necesidad de establecer una colaboración estrecha con el Gobierno para garantizar que los ayuntamientos pequeños puedan acceder a programas de regeneración urbana y ambiental, así como a iniciativas orientadas a reforzar la cohesión social y la calidad de vida en sus barrios.
Al finalizar la jornada, los presidentes han aprovechado para visitar algunos de los espacios modernistas más emblemáticos de Reus, reafirmando el vínculo entre instituciones y territorio.