Cataluña registró 13.813 ingresos hospitalarios por ictus en 2024. La edad media de las personas afectadas es de unos 70 años, aunque la mayoría tienen entre 55 y 85. El 54% son hombres y el 46% mujeres. En los últimos años se ha observado un leve incremento del número de casos, relacionado principalmente con el envejecimiento. También ha aumentado más de un 25% la tasa de activación del Código Ictus en los últimos cuatro años, gracias a la mejor detección de los síntomas por parte de la ciudadanía y a la consolidación de los circuitos de emergencia implantados en todo el país. El Sistema de Emergencias Médicas (SEM) atendió a 8.315 personas con sospecha de ictus en 2024.
Esta cifra consolida una tendencia de incremento continuado en los últimos años. Desde 2019, cuando se atendieron a 5.962 pacientes, los casos gestionados por el SEM han aumentado cerca de un 40%. Del total de pacientes atendidos durante el año pasado, la mayor parte tenían más de 65 años, con 5.774 casos en este grupo de edad (2.831 mujeres y 2.943 hombres). En el tramo de 46 a 65 años se registraron 2.024 pacientes (769 mujeres y 1.255 hombres), mientras que entre 26 y 45 años se atendieron a 447 personas (231 mujeres y 216 hombres). Los casos en edades jóvenes fueron mucho menos frecuentes: 51 pacientes entre 18 y 25 años, cinco entre 15 y 17, y ocho menores de 14 años.
Por regiones sanitarias, se registraron 1.816 casos en Barcelona ciudad, 1.792 en la Metropolitana Norte, 1.138 en la Metropolitana Sur, 963 en Girona, 649 en el Camp de Tarragona, 578 en la Cataluña Central, 575 en el Penedès, 410 en Lleida, 310 en las Tierras del Ebro y 82 en el Alto Pirineo y Arán.
Los profesionales de la ambulancia, mayoritariamente técnicos en emergencias sanitarias, aplican la escala RACE, desarrollada por el SEM y el Hospital Germans Trias i Pujol, que permite identificar ictus potencialmente graves, reducir el tiempo de traslado y mejorar el pronóstico del paciente. Esta escala se utiliza actualmente en más del 99% de los Códigos Ictus en Cataluña y también en el ámbito internacional.
Actualmente, se trabaja en una herramienta que debe servir para ayudar a discriminar con una alta probabilidad un ictus isquémico de uno hemorrágico. También se trabaja en la incorporación de herramientas de IA y algoritmos de predicción de riesgo que ayuden a mejorar las herramientas disponibles en un futuro próximo.
Prevalecen los ictus isquémicos
En Cataluña, la mayoría de los ictus son de tipo isquémico (85%). Actualmente, más del 30% de los pacientes reciben terapias de reperfusión (trombólisis, trombectomía o ambas), con tiempos de inicio de tratamiento cada vez más cortos desde que comienzan los síntomas.
A pesar del incremento del 25% en la activación de los códigos ictus entre 2019 y 2024, la mortalidad al tercer mes después de sufrir un ictus se sitúa en torno al 15% y más de la mitad de los pacientes consiguen recuperar una vida independiente.
‘Todos contra el ictus’
Coincidiendo con el Día Mundial del Ictus, el Departamento de Salud, junto con la Fundación Ictus, ha impulsado el manifiesto ‘Todos contra el ictus’ para unir esfuerzos en la prevención y la atención de esta enfermedad. El manifiesto cuenta con la adhesión de 25 entidades, incluyendo colegios profesionales, sociedades científicas y asociaciones de pacientes, que trabajan conjuntamente para reducir el impacto de esta enfermedad en el ámbito sanitario, social y comunitario.
El documento hace un llamamiento colectivo para prevenir, detectar y superar el ictus desde una perspectiva sanitaria, social y comunitaria. En este sentido, establece cuatro ejes de acción clave: intensificar la prevención y la sensibilización, mejorar la respuesta sanitaria urgente y la atención post ictus, promover la investigación y la innovación, y garantizar la inclusión social de las personas y sus familias.
