El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha hecho un llamamiento este miércoles a Europa para que adopte un “discurso positivo” sobre la inmigración. En una declaración, dirigida en gran parte a Italia, Sánchez ha afirmado que “se están equivocando” al centrar el debate en aspectos negativos, asociando la inmigración con la inseguridad y estigmatizando a los inmigrantes.
Sánchez ha resaltado que la inmigración es esencial para combatir el “invierno demográfico” que se acerca al continente. Según sus palabras, si no se toman medidas, Europa podría perder hasta 30 millones de personas en edad de trabajar en los próximos 30 años, ya que asegura que la inmigración intenta buscar un futuro en los países de destino. En este contexto, ha propuesto tres soluciones: incrementar la productividad a través de la tecnología, impulsar políticas de natalidad y fomentar la inmigración.
El presidente ha recordado que casi el 50% del crecimiento económico de España durante las dos últimas décadas se debe a la contribución de la inmigración. “Necesitamos migración”, ha afirmado, subrayando que actualmente hay 150.000 vacantes laborales en España que requieren mano de obra. Sánchez, aún así, ha subrayado la necesidad de asegurar que esta inmigración sea “legal, ordenada y segura”, insistiendo en su importancia para el futuro del país y del continente europeo.