Desde que la llamaron como 'la jueza sexi de Colombia'en noviembre del año pasado por atender seminuda y con cigarrillo en la mano una audiencia virtual, la jueza Vivian Polania parece haber perdido los papeles.
Y es que ahora ha sido suspendida de sus funciones durante tres meses debido a su participación en un espectáculo erótico con un estríper en las instalaciones del Palacio de Justicia de Cúcuta, donde ejerce como jueza.
De la noche a la mañana pasó a ser ella quien era juzgada, no solo por la Comisión Seccional de Disciplina Judicial del Norte de Santander, sino también, por los miles de colombianos que opinaron sobre el vídeo en redes sociales.
Según reveló en entrevista para el programa 'Sin Carreta' de Juan Diego Alvira, al igual que con el primer vídeo que la hizo pasar un momento amargo al estar en boca de todos, sus médicos tuvieron que incapacitarla por depresión:
“Estoy incapacitada siete días por depresión. Que me hayan llamado como la jueza sexi de Colombia, desde aquí empezaron a abrirme disciplinarios y eso empezó a afectarme gravemente. Estoy aquí, con toda la buena fe, la intención solo fue pasar un rato agradable”, declaró Polania.
“Se me presentó una infección en la garganta y (otros problemas) por psiquiatría. Tengo un síndrome de depresión, por la cual estuve el año pasado incapacitada durante cuatro meses”, siguió lamentando su Señoría.
LA JUEZA NO ESCARMIENTA
La nueva grabación de la jueza Polania en las redes sociales habría sido grabada en las instalaciones del Palacio de Justicia de Cúcuta, en medio de las celebraciones del mes de Amor y Amistad. Y es que la “fiesta de colores” de los diferentes juzgados habría llegado hasta el comedor de la entidad, donde la jueza fue grabada mientras un estríper, con delantal y sin camisa, le bailaba y le ofrecía un pastel con forma de pene.
Según ella, “La comparsa que tuviera la mejor entrada le darían un premio en efectivo, por eso decido hacer la entrada de esta manera. Todos los juzgados lo hicieron, pero a la única que mencionan es a mí. Aquella noche todos rieron (…) eso solo hacía reír”.
En la pieza, se ve a los otros funcionarios celebrando el acto del que participa Polania, pero “a pesar de que estaban tomando licor en horario laboral, en el Palacio de Justicia”, solo ella fue amonestada.
“Una vez me quito la toga, soy otra persona, como cualquiera de vosotros. La gente a mí no me conoce. Soy una persona supremamente sola”, ha rematado Polania.
