Un insólito episodio tuvo lugar este lunes cuando un conductor, totalmente borracho, fue a la comisaría para reclamar la liberación de sus amigos, que habían sido detenidos horas antes, en una fiesta.
Al notar el estado de ebriedad en el que conducía, la policía le ordenó bajar del vehículo para someterlo a un test de alcoholemia y, en su intento de fuga, atropelló a varios oficiales.
El hombre condujo a través de 20 manzanas con un agente sobre el capó. Después, se refugió en su casa, donde su familia salió a defenderlo: van quedado todos detenidos.
GRABADO EN VÍDEO
El esperpéntico episodio quedó grabado en un vídeo por parte de otro automovilista y se puede ver cómo el agente de policía iba medio estirado sobre la parte frontal del vehículo en movimiento, agarrándose con una mano y con la otra hablando por el móvil con los compañeros de comisaría.
El incidente tuvo lugar durante la madrugada de este lunes en la localidad argentina de Fraile Pintado, en la provincia de Jujuy, cuando el acusado fue a la policía para reclamar la libertad de sus amigos, que habían protagonizado disturbios en el Festival del Tomate, celebrado aquel domingo por la tarde.
Cuando los policías pidieron al hombre, de 30 años, que bajara del Volkswagen Bora gris para hacerle un test de alcoholemia, el hombre se atrincheró en su coche, intentando emprender la huida.
Mientras maniobraba, embistió a varios uniformados, uno de los cuales decidió aferrarse al capó. Pero el conductor, lejos de desistir, condujo con el oficial en el capó, hasta su casa. Afortunadamente, los agentes solo sufrieron heridas leves.
COMO UNA CUBA
Por otro lado, el conductor, identificado con las iniciales GR, tuvo que someterse al test de alcoholemia, que dio un resultado positivo de 1,68 gramos de alcohol por litro de sangre.
Finalmente, el fiscal a cargo de la causa lo imputó por los delitos de resistencia a la autoridad y lesiones leves. Fue liberado este lunes por la tarde, al igual que los tres familiares que habían intentado defenderlo.