Lo que debía ser un día de diversión terminó en un drama mayúsculo. El accidente ocurrió alrededor de las 02:00 de la madrugada del sábado al domingo en el parque de atracciones Luna Park de Cap d'Agde, una conocida localidad turística de playa cercana a Montpellier.
La desgracia tuvo lugar en una atracción de riesgo llamada Adrenaline, en la cual una barca colgada de unos cables se eleva hasta una altura de unos sesenta metros y luego se deja caer en una caída libre a unos 110 km/h, para acabar haciendo un movimiento de balancín.
Por motivos que se desconocen, la barca chocó con uno de los dos pilares que la sostenían, en lugar de pasar entre ellos. Las dos víctimas se golpearon violentamente en la cabeza y fueron expulsadas. Los bomberos de Sdis 34 y Smur-Samu intervinieron para rescatar a las dos víctimas.

Un chico de 17 años murió prácticamente al instante y no pudieron reanimarlo por ningún medio, mientras que una chica de 19 años permanece hospitalizada en Montpellier con heridas graves pero fuera de peligro.
CUATRO DETENIDOS
Cuatro personas están detenidas, entre ellas el director del parque de atracciones, tras el accidente mortal que ocurrió en sus instalaciones. Los detenidos fueron interrogados ayer domingo.
El fiscal de Béziers, Raphael Balland, ha abierto una investigación por homicidio y lesiones involuntarias. Balland señaló en un comunicado que se investiga si la atracción podría haber sido utilizada en condiciones de fuerte viento, aunque adelantó que los resultados de las pericias técnicas no se conocerán hasta dentro de varios meses.
Lo cierto es que en la zona soplaban ráfagas de tramontana con golpes de hasta 80 km/h.
La emisora local de la red pública FranceBleu recuerda que esta misma atracción registró un accidente mortal en 2019.