La Policía investiga la muerte de un bebé de 12 semanas que fue localizado sin vida en la cama y al lado de su madre, que estaba drogada y bebida.
Según el informe policial, la muerte del bebé se produjo el pasado mes de octubre en un caso muy complicado que ha conmocionado a la sociedad inglesa.
Al parecer, la madre durmió en la misma cama con sus dos hijos gemelos, una niña, Delilah, y un niño. Cuando se despertó, se encontró a la niña boca abajo e inconsciente, así que llamó a los servicios de emergencia.
La mujer explicó que la noche anterior había consumido 4 botellas de cerveza, pero las pruebas de estupefacientes detectaron que también había consumido cocaína.
El caso ha cobrado mucha relevancia mediática porque la madre había sido víctima de violencia machista, ya que su expareja le dio una paliza. El hombre acabó en la cárcel y ella se fue a vivir con sus padres.
Durante mucho tiempo, los servicios sociales estuvieron pendientes de la madre, que acumulaba muchas "relaciones volátiles" y un "estilo de vida" que despertó las preocupaciones de su entorno.
La investigación policial reveló también que ya había antecedentes o estudios sobre la negligencia de la familia respecto a los niños, también de los otros hijos mayores que tenía la mujer, y que incluso los había llegado a dejar solos.
Ante todo esto, expertos y gran parte de la población no se explica por qué los servicios sociales no intervinieron antes y separaron a los pequeños de la madre, y lamentan que para uno de los dos bebés ahora ya es demasiado tarde.
