La disputa legal entre Paulina Rubio y su exmarido, Colate Vallejo-Nágera, ha dado un giro inesperado con una acusación de presunto maltrato físico hacia su hijo de 14 años. Este nuevo episodio ha agitado aún más la tensa batalla judicial que mantienen ambas partes por la custodia y el bienestar de su hijo.
Según ha informado el programa Y ahora Sonsoles, la defensa de Colate Vallejo-Nágera alega que, tras una discusión acalorada, la cantante castigó a su hijo, retirándole el teléfono móvil, y supuestamente lo agredió físicamente. La situación habría escalado hasta el punto de que la cuidadora del hogar, al oír gritos procedentes de la vivienda, decidió intervenir y llamó a la Policía.
El pasado viernes, se celebró una audiencia virtual urgente en Miami, en la que participaron los dos progenitores, y como testigo, la cuidadora, según el mismo medio. Aunque la juez encargada del caso aún no ha emitido una resolución final, ha ordenado a la cantante que cumpla un proceso de terapia familiar.
Según la periodista Beatriz Cortázar, este no sería el primer incidente de este tipo.
