Las autoridades de Medellín investigan la muerte del actor chileno Álex Andrés Araya Castillo, cuyo cuerpo fue encontrado el 7 de junio pasado en un apartamento que alquiló durante las vacaciones, al que llegó con una mujer que conoció por la aplicación de citas Tinder.
El secretario de seguridad de Medellín, Manuel Villa, afirmó este martes que los primeros informes señalan que “el señor Anaya Castillo, de 41 años, fue encontrado sin vida en una vivienda que había arrendado y tras sostener un encuentro con una mujer que había conocido mediante una aplicación”.
Ha detallado, además, que en el momento de su hallazgo, el ciudadano chileno “se encontraba desnudo y no presentaba signos visibles de violencia”, y por ello las autoridades han reportado el caso “como una muerte por establecer”.
Mientras que en Chile la familia Araya Castillo clama por respuestas y rastrea algunas pistas, Villa informó que actualmente esta investigación se encuentra en “etapa de indagación”.
Ente tanto “Medicina Legal avanza a las pruebas forenses para determinar oficialmente la causa real de su muerte”.
Dos encuentros organizados por Tinder
En declaraciones al medio chileno La Tercera, Eduardo Araya, hermano de la víctima, aseguró que en su estancia en Medellín el actor decidió conocer gente mediante la aplicación de citas Tinder, por la que concretó dos encuentros, uno de ellos el jueves 6 de junio , un día antes de ser encontrado muerto en un apartamento del barrio Los Ángeles que reservó por la plataforma Airbnb.
También explicó que Álex, oriundo de Antofagasta, ingresó al alojamiento por la noche con dos mujeres, que abandonaron el lugar unas horas después, según lo que registraron las cámaras del lugar. “Lo dejaron desnudo sobre la cama, de cabeza para abajo”, dijo.
“Se llevaron las tarjetas, vimos que hicieron viajes a través de la cuenta de Uber de mi hermano y así nos dimos cuenta de que hay más personas involucradas, que ellas eran parte de un grupo que se dedica a hacer estas cosas”, narró el familiar del actor.
Eduardo señaló que hay “muy poca claridad” sobre lo que pasó, pero creen que las mujeres drogaron a su hermano con burundanga hasta dejarlo en una situación de indefensión y la familia las señala como presuntos responsables, al ser las últimas que vieron con vida a Araya Castillo, que había llegado a la ciudad el 1 de junio.
