La niña británica de ocho meses que estuvo en estado crítico después de que se le retirara la respiración asistida el pasado fin de semana, ha muerto esta pasada noche, según ha confirmado un abogado de la familia este lunes.
Los padres perdieron una batalla legal el mes pasado para mantenerla con respiración asistida y trasladarla a un hospital infantil del Vaticano en Roma. La pequeña padecía una rara enfermedad mitocondrial incurable y degenerativa que afectaba la producción de energía en sus células.
El padre de Indi expresó su dolor ante la pérdida: "Mi hija está muerta, mi vida ha terminado a las 1.45 horas". El padre lamentó que a Indi no solo le quitaron la oportunidad de vivir, sino también la dignidad de morir en su casa.
La semana pasada, el gobierno italiano le concedió la ciudadanía italiana a Indi en un intento infructuoso de evitar la retirada del soporte vital y permitir su traslado a Italia. La primera ministra italiana, Meloni, ha expresado en X que su gobierno ha hecho "todo lo que ha podido" para intentar que la pequeña continuara con vida.
