Dries van Agt, quien fue primer ministro de los Países Bajos entre los años 1977 y 1982; y su mujer Eugenie murieron hace unos días mediante la eutanasia. Después de 70 años juntos, la pareja se encontraba en un estado delicado de salud y decidieron poner fin a sus vidas bajo sus propias condiciones, a la vez y rodeados de sus seres queridos.
En los Países Bajos, donde la eutanasia se regularon en el año 2002, ha ido aumentando el número de parejas que deciden poner punto final a sus vidas el mismo día y a la misma hora, en una muerte programada. Todavía representan un porcentaje pequeño del total de muertes por eutanasia, ya que la mayoría se dan en personas con enfermedades graves o incurables o que las mantienen en unos niveles de dolor insufribles.
Van Agt y su esposa Eugenie tenían 93 años, pero se conocieron hace más de 70 años mientras estudiaban. Desde entonces han sido inseparables y ella le hizo alusión a lo largo de toda su trayectoria política: como ministro de Justicia entre 1971 y 1977; como Primer Ministro entre 1977 y 1982; y como Ministro de Exteriores en 1982.
En 1999, Van Agt visitó Cisjordania y desde entonces trabajó en un proyecto para encontrar una solución pacífica al conflicto que viven Israel y Palestina. En 2009, 10 años después, pudo fundar The Rights Forum, un centro de conocimientos que tiene este objetivo.
Después de toda una vida juntos querían morir el mismo día
Durante siete décadas, ambos han estado juntos en todo momento, han viajado, han conocido el mundo y lo han visto cambiar. Por este motivo, ante el delicado estado de salud en que se encontraban, decidieron que ninguno de los dos quería vivir sin el otro. No querían que la muerte los separara y decidieron morir juntos.
Fue el 5 de febrero cuando programaron su muerte, cogidos de la mano y rodeados de sus familiares, según informó la presidenta de la Asociación Neerlandesa para un Final de Vida Voluntario (NVVE), Fransien van ter Beek.
Para llegar hasta aquí, dos médicos diferentes hicieron una evaluación de ambos, de forma separada. Se trata de un protocolo que busca asegurar que ambos cumplen los requisitos para someterse a la eutanasia sin tener en cuenta el estado de la otra persona. También comprobaron que no había “presión” por parte de una de las partes de la pareja para tomar la decisión.
Cabe destacar que Van Agt sufrió una hemorragia cerebral en el año 2019 que le había complicado los últimos años de vida, y la Eugenie también había visto como su vida se apagaba últimamente. Por este motivo, ambos estudiaron la posibilidad de morir por eutanasia y finalmente lo pudieron hacer.