Las autoridades encontraron el cuerpo sin vida de un niño de 6 años, en estado de descomposición, enterrado en el pasillo de la casa de su madre.
Los hechos sucedieron en Arkansas, en Estados Unidos, donde la policía detuvo a la madre después de encontrar el cuerpo y que su otra hija acabara en el hospital.
Según ha explicado la policía, el descubrimiento se dio después de una visita de la abuela a la casa. La mujer hacía más de un año que intentaba conseguir la custodia de los niños, pasando por juicios y litigios legales.
A pesar de que no lo conseguía, aún disponía de algunos permisos para poder ver a los niños, así que fue a casa de los niños a verlos.
Al llegar, los padres de los niños le dijeron que el más pequeño, de 6 años, no estaba porque había ido a casa de unos amigos y que el hermano mayor no podía caminar. Karen, la abuela, sí que pudo ver a su nieta, a quien vio con quemaduras en la cabeza, motivo por el cual decidió llevarla al hospital.
Una vez allí, y después de atender a la niña, que estaba malnutrida y con alguna costilla rota, la mujer denunció los hechos. La policía cree que las heridas de la niña las habían provocado la madre y su novio actual.
Más tarde, la policía contactó con Karen y le dijeron que habían encontrado el cuerpo del niño pequeño enterrado bajo el suelo del pasillo de la misma casa. Según los primeros análisis, creen que el niño murió hace tres meses por heridas que le provocaron la madre y la pareja, aunque se está a la espera de los resultados finales de la autopsia.
La madre del niño, de 28 años, y su pareja, de 33, fueron detenidos y acusados de asesinato, de abuso de un cadáver, de manipulación de pruebas físicas y de ser un peligro para el bienestar de un menor.