Descubren un tratamiento que aumenta notablemente la supervivencia en casos de tumores graves en el cerebro

13 de diciembre de 2023 a las 14:24h

Científicos del Instituto Salk, en Estados Unidos, han descubierto que el tratamiento de inmunoterapia anti-CTLA-4 aumenta considerablemente la supervivencia de los ratones con glioblastoma.

Además, según informa Infosalus, han demostrado que esta terapia dependía de que unas células inmunitarias llamadas linfocitos T CD4+ se infiltraran en el cerebro y desencadenaran las actividades destructoras de tumores de otras células inmunitarias llamadas microglia, que residen permanentemente.

Los hallazgos, publicados en la revista 'Immunity', muestran las ventajas de aprovechar las células inmunitarias del propio organismo para combatir el cáncer cerebral y podrían conducir a inmunoterapias más eficaces para tratar el cáncer cerebral en humanos.

¿QUÉ ES EL GLIOBLASTOMA?

El glioblastoma, la forma más común y mortal de cáncer cerebral, crece rápidamente hasta invadir y destruir el tejido cerebral sano. El tumor envía 'filamentos' cancerosos hacia el interior del cerebro que hacen que la extirpación quirúrgica del tumor sea extremadamente difícil o imposible.

"En la actualidad no existen tratamientos eficaces para el glioblastoma, cuyo diagnóstico es básicamente una sentencia de muerte" afirma la profesora Susan Kaech, autora principal y directora del Centro NOMIS de Inmunobiología y PatogénesisMicrobiana.

"Estamos muy ilusionados por haber encontrado un régimen de inmunoterapia que utiliza las propias células inmunitarias del ratón para combatir el cáncer cerebral y conduce a una reducción considerable, y en algunos casos a la eliminación, del tumor".

LA INMUNOTERAPIA

Cuando los tratamientos estándar contra el cáncer, como la cirugía, la quimioterapia y la radioterapia, dejan de ser eficaces, los médicos recurren cada vez más a la inmunoterapia, la cual anima a las mismas células inmunitarias del organismo a buscar y destruir las células cancerosas.

Aunque no es universal, la inmunoterapia funciona en muchos tumores y ha proporcionado a muchos pacientes respuestas anticancerígenas potentes y duraderas. Kaech quería encontrar nuevas formas de aprovechar el sistema inmunitario para desarrollar tratamientos más seguros y duraderos contra el cáncer cerebral.

EL ANTI-CTLA-4

Su equipo descubrió tres herramientas de lucha contra el cáncer que se habían pasado un poco por alto en la investigación del cáncer cerebral y que podrían cooperar y atacar eficazmente el glioblastoma: un fármaco de inmunoterapia llamado anti-CTLA-4 y unas células inmunitarias especializadas llamadas células T CD4+ y microglia.

La microglia vive a tiempo completo en el cerebro, donde patrulla en busca de invasores y responde a los daños, pero no está claro si desempeña algún papel en la muerte tumoral.

En primer lugar, los investigadores compararon la duración de la vida de ratones con glioblastoma tratados con anti-CTLA-4 frente a anti-PD-1. Después de descubrir que el bloqueo de CTLA-4 prolongaba considerablemente la vida de los ratones, pero no el de PD-1, el equipo pasó a averiguar qué hacía posible este resultado.

Descubrieron que después del tratamiento anti-CTLA-4, las células T CD4+ secretaban una proteína llamada interferón gamma que hacía que el tumor lanzara "banderas de estrés", al tiempo que alertaba a la microglia para que empezara a devorar estas células tumorales estresadas.

A medida que engullían las células tumorales, la microglia presentaba restos de tumor en la superficie para mantener las células T CD4+ atentas y produciendo más interferón gamma, creando un ciclo que se repite hasta que se destruye el tumor.

"Nuestro estudio demuestra lo prometedor del anti-CTLA-4 y esboza un proceso nuevo en el que las células T CD4+ y otras células inmunitarias residentes en el cerebro se alían para destruir células cancerosas", indica el coautor Dan Chen, investigador postdoctoral en el laboratorio de Kaech.

Para comprender el papel de la microglia en este ciclo, los investigadores colaboraron con Greg Lemke, coautor y catedrático de Salk, titular de la Cátedra Françoise Gilot-Salk.Durante décadas, Lemke ha investigado moléculas críticas, llamadas receptores TAM, utilizadas por la microglia para enviar y recibir mensajes cruciales.

Los investigadores descubrieron que los receptores TAM indicaban a la microglia que engullera células cancerosas en este nuevo ciclo. "Nos sorprendió esta nueva codependencia entre la microglia y los linfocitos T CD4+" indica Siva Karthik Varanasi, coautor del estudio e investigador postdoctoral en el laboratorio de Kaech.

"Ya estamos entusiasmados con tantas nuevas cuestiones biológicas y soluciones terapéuticas que podrían cambiar radicalmente el tratamiento de cánceres mortales como el glioblastoma". -asegura Kaech.

A continuación, los investigadores examinarán si este ciclo celular anticancerígeno está presente en los casos de glioblastoma humano. Además, pretenden estudiar otros modelos animales con diferentes subtipos de glioblastoma, ampliando así su comprensión de la enfermedad y de los tratamientos óptimos