Un hombre de 71 años que apuñaló mortalmente a un niño de 6 años e hirió gravemente a una mujer de 32, fue acusado el domingo de un delito de odio. La policía de Illinois (Estados Unidos) alega que eligió a las víctimas por su fe islámica y como respuesta a la guerra entre Israel y Hamás.
El asesino, Joseph M. Czuba
En los últimos días, la policía de las ciudades de Estados Unidos y las autoridades federales han estado en alerta máxima por violencia motivada por sentimientos antisemitas o islamófobos. Los funcionarios del FBI, junto con grupos judíos y musulmanes, han informado de un aumento de la retórica de odio y amenazante.
HALLAZGO PERTURBADOR
En el caso del área de Chicago, los agentes encontraron a la mujer y al niño a última hora de la mañana del sábado en una casa de un municipio de Plainfield, a unos 65 kilómetros al suroeste de Chicago, dijo la oficina del sheriff del condado de Will en un comunicado en las redes sociales.
El niño fue declarado muerto en un hospital. La mujer tenía múltiples puñaladas y se esperaba que sobreviviera, según el comunicado. La autopsia del niño demostró que había sido apuñalado decenas de veces.
"Los detectives pudieron determinar que ambas víctimas de este ataque brutal fueron el objetivo del sospechoso porque eran musulmanes y por el conflicto en curso de Oriente Medio que involucraba a Hamás y los israelíes", dijo el sheriff.
Según la oficina del sheriff del condado de Will, la mujer había llamado al 911 para informar que su propietario la había atacado con un cuchillo, añadiendo que después corrió a un baño y continuó luchando contra él.
El hombre sospechoso del ataque fue encontrado el sábado en el exterior de la casa y "sentado derecho en el suelo cerca del camino de acceso de la residencia" con un corte en la frente, dijeron las autoridades.
HOMICIDIO AGRAVADO
Joseph M. Czuba de Plainfield fue acusado de homicidio en primer grado, intento de asesinato en primer grado, dos cargos de delitos de odio y agresión agravada con un arma mortal, según la oficina del sheriff. El domingo estaba detenido y esperaba pasar a disposición judicial.
Las autoridades no dieron a conocer los nombres de las dos víctimas, pero el tío paterno del niño, Yousef Hannon, habló el domingo en una conferencia de prensa organizada por el Consejo de Relaciones Americano-Islámicas.
Ahmed Rehab
Allí el niño fue identificado como Wadea Al-Fayoume, un niño palestino-americano que hacía poco había cumplido 6 años. La organización identificó a la otra víctima como la madre del niño.
“No somos animales, somos humanos. Queremos que la gente nos vea como humanos, que nos sienta como humanos, que nos traten como humanos, porque eso es lo que somos", dijo Hannon, un palestino-americano que emigró a Estados Unidos en 1999 para trabajar de maestro de escuela.
CONTRA CUALQUIER RACISMO
La organización musulmana de libertades civiles calificó el crimen de "nuestra peor pesadilla" y parte de un aumento inquietante de llamadas de odio y correos electrónicos desde el estallido de la guerra entre Israel y Hamás.
El grupo citó mensajes de texto intercambiados entre miembros de la familia que mostraban que el atacante había hecho comentarios despreciables sobre los musulmanes.
"Los palestinos, básicamente, de nuevo, con el corazón roto por lo que está pasando a su gente", dijo Ahmed Rehab, director ejecutivo del grupo, "también se deben preocupar por la seguridad inmediata de la vida y de los extremistas que viven aquí en esta democracia, la más libre del mundo”.
El padre, Oday Al-Fayoume
En respuesta al aumento de las amenazas, la policía del estado de Illinois se está comunicando con las fuerzas del orden federales y se acerca a las comunidades musulmanas y líderes religiosos para ofrecer apoyo, según un comunicado de prensa del domingo del gobernador demócrata de Illinois JB Pritzker.
"Quitarle la vida a un niño de seis años en nombre del fanatismo no es más que maldad", dijo Pritzker.
"Wadea debería ir a la escuela por la mañana. En cambio, sus padres se despertarán sin su hijo. Esto no fue sólo un asesinato, fue un delito de odio. Y cada ciudadano, incluidos nuestros vecinos musulmanes, judíos y palestinos, merece vivir libre de la amenaza de este mal", remachó el gobernador.
El presidente Joe Biden se hizo eco de este sentimiento el domingo, diciendo en un comunicado: "Este horrible acto de odio no tiene cabida en América y se opone a nuestros valores fundamentales: la libertad del miedo por cómo rezamos, qué creemos y quién somos".
El director del FBI, Chris Wray, dijo el domingo en una llamada con los periodistas que el FBI también se está moviendo rápidamente para mitigar las amenazas.
