Se han colocado flores y tarjetas cerca de la escena donde tuvo lugar el apuñalamiento, ayer miércoles por la mañana, en Croydon, al sur de Londres. Según un testigo, la víctima, una adolescente de quince años que iba al instituto, recibió una puñalada en el cuello con un cuchillo de grandes dimensiones.
Un chico de 17 años, del cual no se ha divulgado la identidad y que se cree que conocía a la víctima, fue detenido poco después de que la chica muriera. Los testigos aseguran que, previo al apuñalamiento, la chica había bajado del autobús número 60 con un grupo de amigos cuando fue atacada.
Los testigos dijeron que el conductor del autobús y otros peatones intentaron salvarla. Parece que había habido una discusión entre el chico, que quería regalar un ramo de flores a la víctima.
"El chico le quería dar un ramo de flores, pero ella lo rechazó, no quería nada con él. Después se puso violento y la apuñaló", explicó un testigo.
La Policía Metropolitana instó a las personas con información o imágenes del ataque a presentarse. El superintendente Andy Brittain explicó que los agentes apoyaban a la familia de la chica que "se enfrentaba a la noticia más trágica".
"Estoy en contacto con la comunidad local, que está claramente tan preocupada como nosotros por este trágico incidente", ha añadido.
DESPUÉS DEL CRIMEN
Brittain aseguró que los agentes estuvieron en el lugar de los hechos dos minutos después de recibir la llamada y ofrecieron los primeros auxilios de emergencia, que resultaron infructuosos. "Sé que los agentes que han respondido esta mañana, junto con nuestros compañeros del servicio de emergencias, están devastados por la muerte de la víctima".
Brittain calificó el ataque de "la peor pesadilla de todos los padres". Al visitar la escena, el comisario de la Policía Metropolitana, Sir Mark Rowley, calificó el asesinato de "insensato" y dijo que era "imposible de entender".
Añadió que fue "emocionante y humilde conocer a muchos miembros de la excepcional comunidad de Croydon que se han unido en apoyo de una familia que ahora se enfrenta con el dolor más inimaginable".
LUGAR DE HOMENAJE IMPROVISADO
La gente de Croydon dejó flores en la escena del apuñalamiento. Una de las cartas dejadas en el lugar como homenaje decía: "Lo siento, vivimos en este mundo loco, esto no tiene sentido. Vuela allá arriba, mi madre te cuidará. RIP bonita, para siempre joven, muerta demasiado pronto".
John Whitgift, miembro del Old Palace, la escuela para chicas de Croydon donde estudiaba la chica, dijo que la comunidad escolar estaba "profundamente conmocionada por la muerte de una amiga y alumna muy querida".