Al menos 45 personas han muerto este domingo en un naufragio en Calabria, en el Sur de Italia, cuando intentaban llegar a la costa en una embarcación. Las ONG que hay en la zona, como es el caso de Open Arms, han informado de que se ha podido rescatar a más de 80 personas, pero temen que la cifra final de víctimas sea elevada. “Que caiga sobre la conciencia de los que obstruyen los rescates por ley, es incomprensible, inhumano”, ha apuntado en un tuit. Según varios medios italianos, la embarcación había salido de Turquía y se habría roto al chocar con unas rocas a causa del mal tiempo.
También se ha pronunciado Save the children, que ha señalado que “el dolor y las palabras de condolencia duran poco”. En este sentido, la entidad ha recordado que las personas muertas en este naufragio se suman a las más de 25.000 víctimas que han perdido la vida en el Mediterráneo desde 2014. “En Italia y Europa la política debe ser un salto cualitativo para evitar estas tragedias”, ha subrayado.
Por lo que respecta a la primera ministra italiana, Giorgia Meloni ha lamentado “la pérdida” de “tantas vidas humanas” y se ha comprometido a seguir trabajando para evitar estas “tragedias”. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha remarcado en un tuit que está triste por el “terrible naufragio” y la pérdida de vidas de “migrantes inocentes”.