Valls abrirá con música el nuevo espacio presidido por la antigua muralla medieval de Sant Antoni después de las obras de restauración realizadas en el último año. El grupo Wild Dixie Boys será el encargado de poner la música de jazz este sábado día 1 de abril a partir de las 22 h, en un concierto que permitirá descubrir este nuevo espacio público situado en la puerta de entrada al Centro Histórico de Valls por el Portal Nou.
Las obras de recuperación de la muralla se iniciaron en marzo del año 2022 y, con una inversión de 450.000 euros, han permitido la consolidación, reinterpretación y urbanización de todo el espacio. El proyecto, que ha contado con financiación del 1,5% Cultural del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y el departamento de Cultura de la Generalitat, representa la primera gran obra en el proyecto impulsado por el Ayuntamiento para la progresiva recuperación de las antiguas murallas medievales de Valls, declaradas en su conjunto Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN).
El proyecto ha comportado la recuperación de la muralla en su tramo inicial situado junto al Portal Nou y entre las calles del Mur y de Tomàs Caylà. Además de la consolidación de este tramo de la antigua muralla del siglo XIV y su reinterpretación histórica, las obras han incluido la urbanización del solar, un amplio espacio libre de 700 m² accesible a la ciudadanía que se convierte en nuevo punto de encuentro con vista a la muralla. Este tramo destaca tanto por su singularidad como por su situación, en una de las principales entradas de la ciudad y también del Barri Antic, junto además del entorno de la iglesia de Sant Joan, declarado también BCIN.
Espacio abierto con vistas a la muralla
El ámbito se ha urbanizado con plataformas que salvando el desnivel forman bancos y escalones para pasar a ser un espacio abierto, ajardinado y con árboles. En la parte superior del paramento este se ha construido una coronación que reproduce el escalonado que hacía la muralla y que se puede ver en su basamento. Las obras han supuesto también la consolidación de las partes más degradadas de la muralla y su restauración.
Al resto de paredes y paramentos contemporáneos que se han conservado se les ha aplicado una pátina cromática de color neutro para que el visitante pueda identificar con facilidad qué partes se corresponden a restos de la muralla y cuáles a construcciones posteriores. También se ha dejado visto y saneado el muro de contención del antiguo cementerio de Valls del siglo XVI, de tal manera que la junta entre esta pared y la torre medieval se deja marcada para diferenciar las dos épocas constructivas.
Los trabajos de prospección arqueológica realizados con anterioridad a las obras pusieron al descubierto la estructura de un arco y otros materiales de pared de muralla del XIII que se corresponderían al llamado portal de la Font dels Clergues, del que se tienen muy pocas referencias históricas documentadas. En el mismo paramento se encuentran los restos de la torre soberana de Valls del siglo XIV, la torre más alta de las 32 que formaban parte de la muralla de Valls, que aprovechó la estructura del siglo XIII.
Además, se localizaron también otros restos de la estructura defensiva, como un tramo del foso, y un antiguo pavimento de adoquines del siglo XVIII. Las obras de recuperación de este espacio han sido adjudicadas a Rècop Restauracions Arquitectòniques, empresa con más de 25 años de experiencia especializada en la conservación, restauración y rehabilitación del patrimonio.
Muralla de Sant Francesc, siguiente proyecto
La recuperación de Sant Antoni es el primer proyecto de envergadura que la ciudad afronta de recuperación de las antiguas murallas medievales. La siguiente fase se concentrará en la muralla de Sant Francesc, en fase de redacción de proyectos a cargo de las arquitectas Marta Milà y Anna Ibarz, ganadoras del concurso de ideas.
La propuesta ganadora contempla poner al descubierto este tramo de muralla del siglo XIV que ahora se encuentra oculta en el interior de las casas, pero también incluye aprovechar el derribo de los edificios para generar un nuevo espacio público de valor patrimonial y paisajístico abierto al vecindario. De este modo, se generará un paseo en la zona que en la actualidad ocupan las casas que comunicará con la calle de Sant Francesc.
